La Secretaría de Transporte recibió el anuncio de las partes

La "burguesía patagónica" ahora se quedó con Southern Winds

El titular de SW, Juan Maggio, le vendió la compañía al empresario hotelero Horacio Rozemblum

Los propietarios de la aerolínea Southern Winds (SW) acordaron ayer la venta de la empresa al hotelero Horacio Rozemblum, informaron anoche fuentes oficiales. "Las partes informaron ayer a la Secretaría de Transporte que llegaron a un acuerdo de compra-venta de la aerolínea", señalaron desde el Ministerio de Planificación, sin precisar detalles.

El anuncio se produce en momentos en que se esperaba una resolución del conflicto de los trabajadores de SW, que se declararon en estado de "asamblea permanente" en reclamo del pago de los sueldos de junio y la efectivización del aguinaldo.

Rozemblum es dueño de Sociedad Hotelera Sudamericana, que controla el hotel Glaciar en Ushuaia y otro establecimiento en la localidad santacruceña de El Calafate. Se suma así a la camada de empresarios que hicieron fortuna en el sur del país, como Enrique Ezkenazi o Alejandro Ivanissevich, que siguen tomando posiciones en distintas empresas a nivel nacional.

La empresa, fundada por Juan Maggio, fue auxiliada en septiembre de 2003 por el Estado, que se hizo cargo del 50 por ciento del costo de la operación de Lafsa y como contrapartida, la compañía cordobesa daba trabajo al personal de las desaparecidas Dinar y Lapa.

En las últimas horas trascendió que Rozenblum había ofrecido 400 mil pesos a cambio de hacerse cargo de la compañía aérea, en crisis financiera, luego de verse involucrada en escándalo por el tráfico de cocaína a España.

A partir de ese momento, los directivos de SW habían anunciado las negociaciones con Rozenblum, quien había ofrecido a Juan Maggio y Carlos Naviera, 400 mil pesos a cambio de hacerse cargo de la empresa, que actualmente está concursada con un pasivo que rondaría los 60 millones de dólares.

Tras el escándalo desatado por el narcotráfico en Ezeiza, la empresa entró en convocatoria de acreedores y el Estado le rescindió el contrato de cooperación, que iba a ser renovado semestralmente hasta diciembre de 2005.

A partir de allí, SW llegó a un acuerdo con la aerolínea chilena Lan, para garantizar la continuidad de las operaciones de la aerolínea cordobesa y la continuidad laboral del personal y con la finalidad de facilitar el servicio de cabotaje por un plazo de 90 días, que venció hace un mes.

Ayer el personal de SW mantenía el paro que había iniciado el jueves por tiempo indeterminado para pedir el pago de salarios atrasados, ya que "no se liquidaron los sueldos y el aguinaldo de junio", manifestaron los trabajadores en un comunicado en el que expresaron "incertidumbre sobre las fuentes de trabajo debido al potencial cierre de la empresa", agregaron (ver página 18).

Luego del escándalo de Ezeiza circularon varias ofertas para la compra de la compañía. Una de ellas fue la que realizó un conjunto de acreedores, encabezados por el argentino Martín Varsavsky, quienes ofrecieron quedarse con la empresa y su deuda de 60 millones de dólares, a cambio de un pago simbólico de 100 mil pesos a Juan Maggio.

Esa propuesta fue rechazada de plano por el titular de SW, pese a que la compañía no podía hacer frente a su pasivo y estaba seriamente desacreditada.

SW pasó a manos de un empresario patagónico.