Tiro Federal, algo histórico

El fútbol es un deporte que suele servir a los argentinos para explicar muchas de las cosas que nos suceden. La pasión y el conocimiento que una gran parte de la población posee sobre esta disciplina parecen habilitarla para trasladar análisis de la esfera deportiva a otros ámbitos: políticos, económicos o sociales. Y nunca faltan aquellos fanáticos que todo lo reducen al terreno futbolístico. Puede interpretarse como un fenómeno cultural donde se expresan las carencias educativas del país. Aunque también se puede sostener que es la inteligencia de los iletrados, que procuran hacer oír su voz del modo más gráfico. Y lo logran. Algo de verdad universal el fútbol encierra, de otra forma no se explica por qué los grandes directores técnicos son convocados en el mundo empresarial para que expliquen cómo llegaron a conformar un equipo exitoso. Tal el caso de Carlos Bianchi.

En Rosario, el fútbol produjo un hecho histórico. Un club de barrio, centenario (Tiro Federal), que prácticamente había desaparecido como institución, fue rescatado por un empresario local que creyó, en 1997, en la posibilidad de conducirlo -con criterio, planificación y mucho esfuerzo- a la primera división. Y lo concretó, de manera inobjetable y con el reconocimiento de todos los dirigentes.

Algunas voces -siempre críticas- sostienen que se trata de un negocio, ya que el club no tiene gran masa societaria, y le vaticinan un futuro de corto vuelo. Sin embargo, es posible imaginar algo más venturoso para esta institución, recuperada casi por azar de la antropología futbolera. Por qué no confiar en la posibilidad de que la ciudad posea tres equipos con hinchadas propias. ¿Acaso la pasión debe sujetarse por siempre a dos equipos y a cuatro colores? Y si Rosario ha comenzado a dar ejemplos de cómo se debe trabajar para crecer -reconocida e imitada por distintas ciudades-, por qué no aceptar que en el plano deportivo es posible también dar un salto y contener a otro equipo en primera por largo tiempo.

En materia de tácticas y estrategias, el fútbol otorga infinidad de enseñanzas para que quienes estén en inferioridad de condiciones puedan equiparar fuerzas y volverse abiertamente competitivos. Y no hay frontera para los sueños de grandeza, si un grupo de gente mantiene sus convicciones intactas y continúa trabajando con sensatez y sentido común.

Tiro Federal hizo historia alcanzando la primera división. La ciudadanía debe reconocerlo: tal vez cuando ello suceda, algo verdaderamente nuevo esté comenzando.