Gran Premio 25 de Mayo en San Isidro

El Lunicornio lució renovado en su regreso a las pistas

Con un sorpresivo desenlace por los fondistas llegaron a la definición, se llevo a cabo ayer una nueva edición del Gran Premio 25 de Mayo, prueba de mayor relevancia disputada en el césped normal de San Isidro. Allí, y tras un largo alejamiento, El Lunicornio retornó a las competencias oficiales con el mejor de los auspicios, al superar por el contundente margen de 6 cuerpos a Flag's Boy -también prometía un alto sport-, luciendo en la montura del vencedor el jockey peruano Jacinto Rafael Herrera.

El pensionista de Guillermo Frenkel Santillán, que venía de tres entregas discretas en cotejos selectivos compitiendo siempre en pruebas de mediofondo, se hizo fondista de golpe y en su primer intento, inscribió su nombre de forma impensada en la galería selecta de los stayers nacionales, que supieron correr y ganar esta prueba, dándole mayor realce a sus respectivas campañas.

El representante del haras Santa Paula hizo valer su poderosa atropellada, la que bien aprovechada durante un desarrollo, puede catapultarlo a convertirse en un fondista de nota, habida cuenta que, unos por venta, y otros por haber alcanzado ya edad para estar en un haras, han dejado liberado el ránking de las pruebas de resistencia a cualquier tipo de pretensión.

Además, hay que agregarle el acierto por el logro del trainer y ex veterinario Frenkel Santillán, quien lo recibió hace sólo dos carreras, al repartir los propietarios de la caballeriza Santa Paula sus caballos que eran entrenados por Ernesto Romero, y ahora se encuentran repartidos entre el Bebe, Eusonio Boni y Mayansky Neer.

Santillán, continuó anotándolo en el mediofondo, y luego de su mal desempeño frente a Mr. Abdul en la milla, optó por comenzar a prepararlo para las largas, y el cambio de vareo le dio resultado rápidamente.