|
| miércoles,
04 de
mayo de
2005 |
|
¿Quién paga los pasacalles?
El despertar del 1º de Mayo la población de la vecina ciudad de Villa Gobernador Gálvez recibió un especial saludo: muchos pasacalles de salutación por el Día del Trabajador en distintas calles y paseos públicos. Debajo de la leyenda, la firma de los autores, los inefables Pedro González y Graciela Bonomelli, diputado nacional e intendenta respectivamente. Es costumbre de ambos políticos pejotistas desparramar pasacalles conmemorando distintas festividades. Ahora bien, lo que algunos vecinos se preguntan es si son pagados por los firmantes o por la Municipalidad, lo que equivaldría a decir los contribuyentes.
|
Una obra polémica
Cuando días pasados se inauguró en la Legislatura de Santa Fe un ingreso para discapacitados todos aplaudieron la iniciativa de la vicegobernadora María Eugenia Bielsa. Sin embargo, la obra no conformó al diputado radical Santiago Mascheroni, que elevó un pedido para que se explique cómo y por qué se hizo. Al parecer, según se dijo, para realizar la explanada que costó unos 35 mil pesos, no se habría llamado a licitación. Y para los disconformes, la rampa es muy empinada y la baranda de acero resulta incómoda y proclive a provocar accidentes. ¿Habrá explicaciones?
|
Adianchi, señor director
Dicen que el conocido director cinematográfico rosarino Gustavo Postiglione hizo su aparición el fin de semana por el estadio cubierto de Newell's acompañado por seis jovencitas rubias muy monas. Allí se presentaban los cantantes finalistas de Operación Triunfo. Pero el director de la exitosa película "El asadito", lejos de sacar entradas, llamó a los agentes de prensa del show y logró pasar de garrón. Ya en la platea, el hombre se ubicó al lado de Manuel Wirtz, director artístico del espectáculo, y se bancó como un duque los estridentes grititos de sus bellas acompañantes cada vez que los artistas hacían su aparición.
|
Y la multa, ¿dónde está?
Dicen las malas lenguas que dos concejales, uno radical y otro peronista para más datos, fueron vistos de madrugada llevando el compás de la música en un conocido boliche nocturno. Ellos dijeron que habían ido a controlar si se cumplía con la norma que regula el número de asistentes según la superficie del local. Al parecer, a simple vista se podía comprobar que había más gente de lo permitido así que, celular en mano, empezaron a llamar a funcionarios municipales para que se llegaran hasta el lugar. Finalmente, uno llegó con personal de inspección y constató la infracción, por lo que prometió que se labraría el acta (llámese multa) correspondiente. Pero para sorpresa de los inocentes concejales, la confitería sigue adelante como si nada. ¿Habrá que esperar una década hasta que alguien actúe? |
|
|
 |
"Nos debemos un peronista que no sea apéndice de dirigentes nacionales o provinciales"
Esteban Borgonovo
Candidato a concejal por el PJ
|
Ver noticia 
|
|
|
Copyright 2003 | Todos los derechos reservados
La Ciudad
