| sábado, 26 de febrero de 2005 | Blues local. Una multitud despidió a Pappo en el cementerio de La Chacarita Una leyenda del rock nacional perdida en el vértigo de las rutas argentinas Amigos, colegas y fans del músico, que murió en un accidente carretero, le dieron un conmovedor último adiós Miles de personas entonando canciones del ya legendario Norberto "Pappo" Napolitano despidieron en horas de la tarde de ayer los restos del músico que popularizara el blues "Una casa con diez pinos" en el Cementerio de La Chacarita, de Buenos Aires.
El cantante y guitarrista, una de los máximos referentes del rock argentino, se mató ayer a la madrugada, a los 54 años, en un accidente con su motocicleta cerca de la localidad bonaerense de Luján.
"Carpo no murió", "Olé, Pappo, Olé Pappo", "Pappo no se va" y la emblemática canción "Queda mucho por hacer", que hizo famosa la banda de rock pesado Riff en los tiempos en los que Pappo era su guitarra líder, fueron corados por la multitud que se acercó a darle el último adiós al ídolo.
Muchas figuras del ambiente rockero, como Alejandro Lerner, Juanse, Michel Peyronel, Javier Martínez, Alejandro Medina y "Alambre" González, integraron el cortejo fúnebre, aunque también se acercaron al lugar personalidades de otros ámbitos, como Guillermo Vilas, Jairo, María Fernanda Callejón, Divina Gloria, el abogado Fernando Burlando y el empresario Jorge "Corcho" Rodríguez.
Pappo se cayó con su moto Harley Davidson y fue atropellado por un automóvil cuando circulaba por una carretera. Su hijo y su nuera viajaban en otra motocicleta y resultaron ilesos, según informaron fuentes policiales y periodísticas.
Según las primeras pericias, Pappo tenía al momento de su muerte un "alto nivel de alcohol en la sangre", informó la agencia noticiosa DyN en base al informe forense difundido por fuentes del Ministerio de Seguridad Bonaerense.
El músico había alquilado una casa para pasar el verano en esa zona y en la noche del jueves fue a cenar a un restaurante junto a su hijo y su nuera. El dueño del local declaró hoy a la prensa que Pappo y su hijo tomaron cerca de tres litros de vino durante la comida y luego salieron a la ruta en "malas condiciones".
"Tomaron unos tres litros de vino y después se retiraron. El andaba con el ánimo de siempre: alegre. Subieron a las motos y salieron en forma violenta", aseguró el empresario gastronómico al canal de noticias TN.
Sus restos fueron trasladados primero a la morgue de Luján, 60 kilómetros al noroeste de Buenos Aires, y fueron sepultados en horas de la tarde de ayer en el cementerio de la Chacarita, de Buenos Aires. Una multitud se concentró en el lugar para despedir al músico (ver aparte).
Reconocido como uno de los mejores guitarristas de blues, que incluso fue invitado por el músico estadounidense B.B.King a tocar en el Madison Square Garden de Nueva York, Pappo integró varias bandas pero logró su mayor fama con los grupos Los Abuelos de la Nada, Los Gatos, Pappo's Blues y Riff y se convirtió en un personaje de la escena musical argentina.
Entre sus temas más conocidos se cuentan "El tren de la hora 16", "Hombre suburbano", "Susy Cadillac" y "Sube a mi voiture". Su interpretaciones, siempre intensas, se caracterizaron por la potencia su voz ronca y las guitarras desgarradas de sus solos de rock duro.
Sin embargo, fue con la canción "Mi vieja", cuya letra pertenecía a los hermanos Borenstein, que su popularidad desbordó el ámbito rockero y se transformó en un mito nacional cuando varias generaciones entonaron aquella recordada letra de "nadie se atreva a tocar a mi vieja..."
Pappo, también conocido como El Carpo, nació el 10 de marzo de 1950 en Buenos Aires y durante las décadas de los 70 y 80 vivió varios años en Gran Bretaña y Estados Unidos, donde tiempo después recorrió la legendaria Ruta 66 con su moto.
Amante de la velocidad, los autos y las motocicletas, llegó a tener un taller mecánico propio y convertirse en piloto de las categorías Turismo Carretera y Top Race. También actuó en varios programas de televisión y películas.
Su pasión por los fierros entusiasmó a Adrián Suar para convocarlo a participar de la tira de Pol-Ka "Carola Casini", en la que El Carpo compartió cartel con Araceli González y Juan Palomino. La labor del músico en el envió le valió ganar un Martín Fierro, premio que no fue a buscar porque, según dijo, él era músico y no actor.
Pappo, que el próximo 10 de marzo cumpliría 55 años, era famoso por su humor ácido y su carácter fuerte, que lo llevó a mantener varias polémicas con sus colegas a los largo de su carrera, aunque siempre sus diferencias no fueron más allá de las críticas y las ironías.
Sus amigos, que los tenía y muchos, lo pintaban como un hombre de gran corazón y muy familiero. Sin embargo, a El Carpo lo apasionaba el boliche, salir de noche y las emociones fuertes, acaso por eso disfrutaba tanto el vértigo de salir a la ruta en su Harley Davidson.
Respetando un viejo anhelo de Pappo, sus restos no fueron velados. No obstante, numerosos amigos, allegados y fans del músico se reunieron ayer por la tarde frente a la casona de Alvarez Jonte al 2500, en el barrio La Paternal, donde vivía el artista.
El dolor era incontenible y, en el ambiente, resonaban las palabras que Pappo, como una premoción o un secreto deseo, había dicho un tiempo atrás: "Cuando me muera, no quiero que me lloren, ni me velen. Sencillamente recuérdenme con mi música. Donde haya una guitarra, el sonido del rock estará presente". enviar nota por e-mail | | Fotos | | Motoqueros, amigos y músicos se sumaron al cotejo fúnebre. | | |