Apresan a sospechoso del robo a un portavalores

Es un hombre de 29 años al que le imputan el ataque perpetrado el 19 de octubre en Córdoba y Corrientes

Siguiendo las pistas del arrebato de 50 mil pesos a un portavalores en peatonal Córdoba y Corrientes, ocurrido el 19 de octubre pasado, efectivos de la Brigada de Investigaciones de la Unidad Regional II detuvieron como sospechoso de ese espectacular hecho a un hombre de 29 años. El apresado tiene antecedentes por delitos contra la propiedad y purgó 5 años y medio de prisión. Los efectivos también detuvieron a la concubina del hombre y secuestraron una pistola calibre 40, un arma de guerra utilizada por fuerzas especiales de la Nación. También secuestraron municiones calibre 38 largo, 45 y 9 milímetros.

Con una orden de allanamiento y de la mano del jefe de la agrupación Unidades Especiales, comisario mayor Alejandro Franganillo, los efectivos llegaron a un pequeño almacén de pasaje Piamonte al 2500, a cinco cuadras de Puente Gallego. Los uniformados iban tras la pista de uno de los dos delincuentes que hace dos meses le robaron un maletín con 50 mil pesos a un portavalores, al que le pegaron dos disparos, a pocos metros de la Bolsa de Comercio.

El golpe aconteció el martes 19 de octubre a las 15.10. Dos disparos alteraron el ritmo del cierre bancario en plena peatonal. Tres hombres armados esperaron que dos empleados de la firma Rosental Carbatur realizaran una de las habituales operaciones de la empresa. Walter Montero, de 39 años, y su compañero Enzo Rojas, de 30, llevaban un attaché con el dinero que acababan de retirar de la empresa Transatlántica. Cuando los dos portavalores llegaron a la peatonal y Corrientes, un hombre vestido de traje que los seguía le aplicó a uno de los empleados un culatazo en la cabeza. El hombre soltó el attaché con el dinero. Con el botín en sus manos, otro de los delincuentes le disparó dos veces a Rojas hiriéndolo en una pierna y en un glúteo. Los delincuentes huyeron en una moto enduro.


Experto en salideras
Los uniformados buscaban en pasaje Piamonte al 2500 a un viejo conocido: Gustavo Caramazana, de 29 años, un "laburante de las salideras". Caramazana tenía antecedentes por delitos contra la propiedad y había purgado una condena de 5 años y medio por un robo calificado de 1994. En la pequeña granja, en la que además funcionaba un quiosco, los vigilantes se encontraron con una pistola Taurus calibre 40 con su numeración limada. Tenía el cargador completo: 12 balas y una en la recámara. "Es un arma de guerra, de las que usan las fuerzas especiales", explicó una fuente de la investigación. "Ese calibre traspasa los chalecos antibala".

Además se procedió al secuestro de 20 cartuchos calibre 38 largo, 31 municiones calibre 45, dos cargadores calibre 9 milímetros marca Browning, una bolsa con clavos miguelitos y una importante cantidad de elementos pirotécnicos. También se secuestró un bolso de color negro con la inscripción "Transatlántica" y una saca portavalores de banco color verde, elementos que comprometen seriamente al apresado. También se incautó una fuerte suma en dólares estadounidenses.

Con Caramazana también quedó detenida María Elena G., de 19 años, concubina del sospechoso. A prima facie ambos quedaron imputados por tenencia ilegal de arma de guerra y acopio de municiones de guerra. Esta causa quedó en manos de la jueza de Instrucción número 1 Carina Lurati.

En tanto, el próximo martes, la jueza de Instrucción Raquel Cosgaya indagará a Caramazana por el robo al portavalores en peatonal Córdoba y Corrientes.

Los investigadores también tienen en la mira a Caramazana por un robo en un cajero automático de Alberdi al 800 cuando personal de Mako Litoral intentaba recargarlo. También se lo vincularía al robo perpetrado al banco Bisel de la localidad de Fuentes.