| sábado, 16 de octubre de 2004 | Se quedó corto Newell's no pudo romper el cero ante Arsenal José M. Petunchi / La Capital Newell's paró su envión ganador en Sarandí. Dejó dos puntos vitales en su lucha por mantenerse en lo más alto de la tabla y atenuó la ilusión que había despertado en su gente, que aunque se fue satisfecha con la producción futbolística sabe que este empate lo puede lamentar a corto o mediano plazo. El resultado (0 a 0), no obstante, no es del todo malo teniendo en cuenta las complejidades que siempre ofrece un equipo como Arsenal. Después de todo, le permite estar ahí, en la conversación, y mantener un invicto de nueve partidos. Pero es ante esta clase de rivales donde los grandes equipos marcan la diferencia y donde empiezan a describir el techo que tienen. Y los rojinegros, mucho más entusiastas e incisivos en la búsqueda del triunfo que Arsenal, apagaron parte de su fervor en el estadio Julio Humberto Grondona.
El reparto lo dejó mucho más conforme al local que bastante antes de los 90 minutos le bajó la persiana al empate que al equipo del Tolo, que buscó siempre y de manera insistente, y que en los 30 últimos minutos, con el ingreso de Ortega, fue inclinando la balanza hacia el arco defendido por Limia. Pero por falta de profundidad, oficio o impericia, no se pudo llevar los tres puntos que vino a buscar y que, al menos, hasta el domingo le hubiesen permitido quedar en la soledad de la punta.
Con el empate a la vista, hay que decir que Newell's mostró las mismas facetas que entregó a lo largo de esta mitad del torneo y que lo llevó a ese sitial que ahora ostenta: buen trato de pelota, un equipo que sabe a qué juega y un compromiso colectivo importante. Aunque anoche mostró algunas dudas en defensa que no se habían visto en los últimos partidos, pero que siempre fueron subsanadas por el despliegue de Rosada, por los cierres oportunos del Colorado Ré y las apariciones decisivas de Villar.
Para llevarse los tres puntos para Rosario a Newell's le faltó completar la otra mitad del libreto. Mostró ante un mediocampo muy combativo y que ejerció presión en algunos pasajes del partido falta de claridad en el manejo con la pelota, donde Capria fue bien absorbido por la marca de Esmerado, Marino se perdió luego de un buen arranque y Belluschi no estuvo a la altura de sus actuaciones anteriores.
De ese modo sólo quedó la gambeta desequilibrante y para adelante de Ignacio Scocco que fue el arma más importante que mostró el equipo en ofensiva. Por eso, más allá de que tengan características similares, no quedó clara su salida cuando todo indicaba que el hombre a sacar de la cancha por rendimiento era el Memo Borghello.
En medio de este contexto el primer tiempo se consumió entre las ganas y la falta de claridad de los dos. Con un Arsenal que hizo gala de la presión que ejercía en la mitad de la cancha pero apostando casi siempre al pelotazo. Ante eso Newell's le propuso siempre la búsqueda por abajo y con la pelota al pie. Pero nunca tuvo la profundidad como para inquietar en exceso al bueno de Limia y forzar un poco más el trámite como para romper el cero y disfrutar aunque sea por unas horas de la gloria de estar en lo más alto de la tabla. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Borghello la gana con la punta del botín. | | |