A toda velocidad. Ayer a la madrugada, en la Costanera los coches alcanzaron los 130 kilómetros

Secuestran 30 autos y detienen a 8 personas por correr picadas ilegales

La Justicia y la Municipalidad sospechan que estas carreras clandestinas tienen organizadores y sponsors

Carina Bazzoni y Jorge Salum / La Capital

Unos 30 vehículos incautados en el corralón municipal y 8 jóvenes detenidos -entre ellos un adolescente de 17 años- fue el saldo de un operativo realizado en la costanera norte que se convirtió ayer a la madrugada en pista para la realización de picadas clandestinas. El procedimiento fue ordenado por la jueza de Faltas Liliana Puccio, después que la Dirección de Tránsito municipal radicara una denuncia bajo la sospecha de que estas carreras ilegales no son espontáneas, es decir, que hay personas encargadas de organizarlas e incluso sponsorearlas.

"La hipótesis es que las picadas son programadas, y eso es lo que está bajo investigación", advirtió ayer Puccio a La Capital. Y en la misma línea se expresó la titular de la Dirección Municipal de Tránsito, Hebe Marcogliese. "Entendemos que tiene que haber una suerte de organización, lo que desconocemos es qué alcance tiene", sostuvo la funcionaria.

Desde hace tres semanas la Dirección de Tránsito sigue de cerca las picadas que se organizan entre las últimas horas del jueves y la madrugada del viernes en la avenida Colombres, en el tramo que va de Gurruchaga a Gallo.

Pero el operativo que se desarrolló anteanoche comenzó a gestarse el lunes pasado. Ese día el municipio presentó una denuncia contra quienes corren estas carreras en plena vía pública. Horas después la jueza Puccio ordenó el procedimiento del que participaron inspectores municipales y efectivos del Comando Radioeléctrico, el Cuerpo de Guardia de Infantería y la Sección Automotores de la policía provincial.

Curiosamente, y aunque es la que tiene jurisdicción en la zona, la comisaría 10ª no fue convocada ni avisada del tema.


"Daba miedo verlos"
Según se pudo constatar en la madrugada de ayer, de las picadas participaron unos 25 coches, en su mayoría preparados para correr. Estos largaban en grupos de 2 a 4 vehículos y recorrían unos 500 metros por la avenida Colombres. Todo sucedía frente a la mirada de un nutrido público que acompañaba con gritos y aplausos. Lo que nadie suponía en ese momento era que todos los movimientos estaban siendo seguidos de cerca por efectivos policiales e inspectores y funcionarios de Tránsito.

"Realmente daba miedo verlos. En 50 metros algunos autos levantaban 130 kilómetros de velocidad y lo hacían en plena calle donde también había otros vehículos circulando", relató la directora de Tránsito.

El parte policial no es menos elocuente. "Los rodados se desplazaban a gran velocidad entre los demás que lo hacían a velocidad permitida, algunos hasta circulaban en forma zigzagueante poniendo en riesgo las vidas de sus ocupantes y las de terceros, ya sean transeúntes como automovilistas", afirma el documento.

Mientras se desarrollaban las picadas, policías e inspectores de Tránsito se encargaron de filmar las carreras, medir la velocidad mediante radares y tomar nota de marcas de autos, modelos y patentes; en un intento por recabar pruebas que abonen la causa judicial.

Al mismo tiempo, los efectivos formaron un cerrojo sobre las calles perpendiculares a avenida Colombres que les permitió detener a ocho de los conductores (ver Carrera demente) e incautar unos 30 vehículos, de los cuales al menos 25 habrían protagonizado las picadas.

Los ocho detenidos fueron alojados en la Jefatura de Policía y recién recuperaron la libertad ayer al mediodía.

A partir de la semana que viene comenzarán a desfilar por Tribunales para ser indagados bajo tres cargos: conducción peligrosa con exceso de velocidad, participación en competencias de vehículos prohibidas y ruidos molestos. Todos delitos sancionados por los artículos 104 y 105 del Código de Faltas.

Además de esta causa en los Tribunales provinciales, también deberán responder ante el Tribunal Municipal de Faltas, que tiene la facultad de sancionar a quienes cometieron infracciones como conducir con exceso de velocidad o desplazarse en vehículos con modificaciones antirreglamentarias, entre otras. En estos casos, las multas pueden ascender a 3 mil pesos e inclusive llegar a la inhabilitación para conducir.

Los autos que corrían picadas terminaron en el corralón.