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 sábado, 11 de septiembre de 2004

Cómo es el agro en el Estado de Río Grande do Sul
La pampa de los brasileños
El sur del país vecino reúne al 60% de las fábricas de maquinaria agrícola y también se vuelca a la soja

Patricia Martino / La Capital

Porto Alegre (enviada especial). - Campo, campo y más campo. El Estado de Rio Grande do Sul, al sur de Brasil, cuenta con 26 millones de hectáreas destinadas a la actividad agropecuaria. Aunque tradicionalmente fue una región ganadera, los gaúchos vivieron un fenómeno similar al ocurrido en la Argentina, la fiebre verde de la soja ganó terreno y desplazó a los animales. No obstante, el cultivo más característico es el arroz y le sigue muy de cerca la oleaginosa. Por si fuera poco, el amplio crecimiento económico de la zona también recibió un fuerte impulso por el desarrollo de un importante polo industrial. Río Grande do Sul concentra el 60% de las fábricas de maquinaria agrícola, además de otras importantes plantas de acero, automotriz, calzado, cuero y madera.

Así, el desempleo, el mal que acecha a brasileños no marca índices tan elevados en Rio Grande do Sul. Los 10 millones de gaúchos, de los cuales 1,1 millón vive en la capital, Porto Alegre, cuentan con algunas ventajas sobre sus pares de los Estados del norte. Y la actividad que genera el campo es una de las principales.

Fernando Adauto Loureiro de Souza, vicepresidente de Agricultores del Estado de Rio Grande do Sul (Farsul), la entidad que concentra a los grandes productores, contó a La Capital cómo es el escenario agrícola de esa región de Brasil. "El Estado tiene 26 millones de hectáreas destinadas a la actividad, 11 millones para la agricultura y 15 millones para la ganadería. El 50% de la producción de arroz de todo Brasil se siembra en Río Grande, y luego viene la soja, el mijo, el maíz, el trabajo, entre otros", precisó el dirigente.

En el sur del Estado se produce arroz y carne de corte, en cambio en el norte se encuentran los principales cultivos de soja, maíz, trigo, y los tambos. Esta tendencia se debe a que en el norte existen mejores registros pluviales.

En cuanto a la soja, en 2003 el Estado produjo 9,5 millones de toneladas. Actualmente el gobierno tramita un permiso, hasta ahora provisorio, para la plantación de la oleaginosa modificada genéticamente.

Asimismo, el gobierno brasileño tiene la intención de crear un mercado de granos común entre Rosario, Sao Pablo y Rio Grande do Sul para fijar el precio de granos y oleaginosas y dejar de depender de Chicago.

Loureiro de Souza, por otra parte, graficó con algunos números las exportaciones del Estado. "Las ventas al exterior de soja alcanzan unas 3,8 millones de toneladas, mientras que en maíz la cifra es mucho menor porque la mayoría de la producción se destina al consumo interno para la alimentación de animales. Lo mismo ocurre con el arroz que casi no se exporta, sino que se destina al consumo en otros Estados", indicó.


Grandes vs. chicos
En el Estado la agricultura familiar ocupa un papel central. Farsul estima que existen unos 500 mil productores agropecuarios de los cuales cien mil son grandes empresarios y el resto son chicos y se dedican a la agricultura familiar, principalmente al sector frutihortícola. Sin embargo, los propietarios de grandes extensiones de tierra concentran el 70% de la producción de todo Río Grande do Sul.

El representante de Farsul también destacó la importancia de la industria. "El 60% de la producción de implementos y maquinaria agrícola de todo el mercado brasileño se encuentra en Rio Grande do Sul".

En ese sentido, Luiz Fernando Coelho de Souza, profesor de facultad de Agronomía de Porto Alegre dependiente de la Universidad Federal de Río Grande do Sul, destacó el desarrollo de la maquinaria agrícola brasileña. "La producción nacional compite con el mundo, estamos exportando a los países más grandes, por ejemplo tractores a Estados Unidos o Inglaterra. Nuestra maquinaria está en igualdad de condiciones que el resto", precisó.

El profesor explicó que los programas de promoción crediticia con que cuentan los productores, el Finame, para la compra de maquinaria, son el propulsor del crecimiento de las empresas de este sector.

Coelho de Souza remarcó que "los agronegocios ganaron a la ganadería", actividad característica de la zona. "La soja desplazó al ganado, se dio un fenómeno similar al de la Argentina", indicó y agregó que "Brasil aún cuenta con 60 millones de hectáreas para explotar" sin afectar la forestación.

En cuanto a la ganadería, el vicepresidente de Farsul señaló que Río Grande do sul cuenta con unos 14 millones de bovinos, lo cual significó hasta el momento unas 600 mil toneladas para exportación, principalmente proveniente de razas británicas.

Asimismo, el Estado brasileño cuenta con una gran producción de porcinos. De las 570 toneladas que se producen un 25% es para consumo interno, otro tanto para exportación y el restante 50% para el consumo en otros Estados.

En lo que respecta a la ovinocultura, se calcula una producción de 600 toneladas, casi en su totalidad para el mercado exterior.

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La agricultura se hace fuerte en Río Grande do Sul.

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