| sábado, 11 de septiembre de 2004 | El desafío de aumentar las exportaciones a China Especialistas debatieron sobre las oportunidades y amenazas comerciales del gigante asiático Especialistas del comercio y del agro coincidieron en que la Argentina no aprovecha el gran potencial de negocios que brinda actualmente el país asiático, y destacaron la necesidad de diversificar las exportaciones, eliminar barreras sanitarias e impulsar una gestión de Estado que funcione en conjunto con el sector empresario.
Así lo expusieron en el seminario "El sector agropecuario argentino ante el desafío de China", organizado por KPMG.
"A pesar del crecimiento que muestran las exportaciones argentinas, la participación de nuestro país en las compras de nuestro socio asiático es insignificante", afirmó Carlos Bonetti, socio de KPMG.
En el mismo sentido se expresó Alberto Rodríguez, gerente general de la Cámara de la Industria Aceitera (Ciara), quien alertó sobre una "virtual parálisis del comercio", en referencia al sector de granos y oleaginosas, el cual constituye alrededor del 75% de las exportaciones argentinas a China.
Las razones que el especialista expuso fueron, principalmente, las regulaciones que impone la resolución 73 aplicada por China, que obliga a cumplir con las exigencias de precio y calidad al momento de descarga en el puerto bajo leyes chinas, y los nuevos standards de calidad para el aceite crudo de soja (que serían los mismos que se aplican a aceites refinados).
Asimismo, Rodríguez señaló que a raíz de ello el sector privado ha sufrido el default de sus obligaciones contractuales.
Según datos expuestos en el seminario, la Argentina ocupa apenas el 0,6% del total de las compras que realiza China al mundo, lo cual equivale a 2.500 millones de dólares. En relación con los 33.500 millones de dólares que -según recientes anuncios del ministro de Economía, Roberto Lavagna- alcanzarán las exportaciones totales de nuestro país, la cifra es claramente reducida.
La situación fue remarcada por los especialistas al compararla con el caso de Brasil, cuyos productos ocupan un 14% de las importaciones de China, cuando hace 10 años apenas alcanzaba 0,4%. Alimentos, maderas, minerales y autopartes son las principales exportaciones que hoy realiza ese país al gigante asiático.
En referencia a esto, Luis Bussio, secretario general de la Cámara de Industria y Comercio Argentino China, señaló: "Argentina le exporta al país de más población en el mundo, el que marca una tendencia en la economía global, menos del 10% de lo que vende".
Las exportaciones argentinas al gigante asiático están constituidas principalmente por productos agrícolas: el 75% corresponde a cereales, especialmente soja, mientras que el 10% lo ocupan los minerales y el restante 15%, los cueros y productos de la siderurgia.
"Estamos apostando casi a pleno a un solo cultivo", advirtió Bussio en referencia al gran porcentaje que ocupa la soja en las exportaciones argentinas a China, y comentó que se trata de un producto de riesgo que además no aporta valor agregado.
China, con una población de 1.300 millones de habitantes, generadora de un PBI que alcanza 6 trillones de dólares (segundo a nivel global), es el sexto importador del mundo y sus principales demandas son los alimentos y la energía. De esta manera, se presenta como un importante mercado para los productos argentinos, más allá de la soja y otros cereales.
"La carne vacuna, las frutas y los vinos constituyen buenas oportunidades para los productores locales, ya que implican mayor ingreso por habitante y producen un giro hacia patrones occidentales de alimentación", aventuró Bonetti, aunque recordó que las carnes y las frutas sufren restricciones sanitarias en China desde hace unos años a causa de brotes de aftosa (2001) e infecciones provocadas por hongos.
Por su parte, Gustavo Grobocopatel, CEO de Los Grobo, se mostró optimista en cuento a las oportunidades de desarrollo que tiene el sector agropecuario argentino. "Agro e industria combinados generan uno de los clusters más competitivos del planeta", explicó en referencia a las posibilidades de desarrollo del sector en Argentina, y sentenció: "Para venderle a China debemos ser competitivos, y eso no se logrará si no incorporamos tecnología".
Así, Grobocopatel advirtió que actualmente "el desafío es ver cómo integrarse más y lograr que las iniciativas no sean sólo a corto plazo". enviar nota por e-mail | | |