El kirchnerismo va a resistir la derogación

El referente kirchnerista y ex senador justicialista autor de la ley de lemas Alberto Monti declaró ayer que "hay quienes pretenden la formación de una nueva cooperativa con la derogación de la actual normativa electoral", en referencia a cómo se manejaba el PJ antes de la aplicación del sistema, en la década del 80.

"Se sabe que el socialismo, por vocación, es un partido cerrado de tres o cuatro que deciden las candidaturas. Pero nosotros no, y menos en el interior, por eso nos vamos a oponer a regresar al pasado", sorprendió Monti, actual intendente de Correa con cuatro victorias consecutivas para ese cargo.

Señaló que "en casi la mitad de las provincias argentinas se aplica la ley de lemas, por ejemplo en Santa Cruz, de donde proviene el actual presidente, y nadie se rasga las vestiduras ni pretende la eliminación. En principio, porque los que pierden, aceptan la derrota; y segundo, porque permite la participación de la gente".


No al festival de boletas
Monti dijo que la ley de lemas "debe ser reformada" porque tramposamente un decreto reglamentario del gobierno provincial "fue el que permitió el festival de candidaturas y boletas en el cuarto oscuro". Y apuntó que esas modificaciones deberían pasar por dos o tres puntos simples: el primero, que cada sublema a gobernador arrastre uno, y no más, a senador provincial, a intendente y concejales.

Esa modificación reduciría a la tercera o cuarta parte el número de boletas ya que en la última elección cada candidato a gobernador fue, en el caso de Rosario, con dos, tres o más candidatos a intendente. Jorge Obeid llevó a Norberto Nicotra y al padre Joaquín; Hermes Binner a Miguel Lifschitz, Angel D'Ambrosio y Juan Gianni. Y cada uno de estos, a su vez, arrastró dos o más boletas de candidatos a concejal.

Monti, uno de los primeros dirigentes que en el 2002 comenzó a sumar gente para Kirchner en Santa Fe, advirtió que en el justicialismo provincial "algunos están pensando en la derogación" de la ley de lemas "para frenar candidaturas que no respondan a la burocracia partidaria".

Y tomó un ejemplo para graficar: "Imagínese el hipotético caso, a modo ilustrativo lo digo, que dentro de tres años quiera ser candidato a gobernador el canciller Rafael Bielsa. Si tiene que ir a una interna seguramente la estructura del partido lo borrará... Con ley de lemas, podría terminar ganando".