Maradona dijo que se quedará en Argentina

"Me quedo aquí, en Argentina", dijo ayer Diego Maradona, para poner punto final a las discusiones sobre su traslado a otro país para continuar un tratamiento contra las adicciones.

La breve frase que pronunció en diálogo con médicos y familiares apuntó a terminar con las conversaciones para que acepte una propuesta de seguir en Brasil la segunda fase del tratamiento, como se estuvo barajando en los últimos días. "Yo me quedo aquí", respondió, pero volvió a aclarar, una vez más, que sólo aceptaría ir a Cuba.

El desinterés del ex futbolista por irse del país es tal que ni siquiera recibió a médicos y responsables de un exclusivo hospital del interior de San Pablo, especializado en tratamientos de adicciones. Los médicos habían viajado especialmente a Buenos Aires para ofrecerle los servicios del centro de salud. Su ex mujer, Claudia Villafañe, tampoco se reunió con la delegación del hospital brasileño que, en cambio, mantuvo conversaciones con otros allegados al astro deportivo y con autoridades de la clínica privada Del Parque.


20 kilos menos
En pleno proceso de recuperación, el ex jugador pesa ahora 92,300 kilogramos, casi una veintena menos que al ser hospitalizado el 18 de abril. En tanto, los médicos de la clínica Del Parque están satisfechos porque dio negativo de sustancias peligrosas un análisis de orina que se le realizó. Aunque el resultado era esperado, esto indica que el control y el estricto tratamiento al que está siendo sometido el ex capitán de la selección argentina está dando resultado y el cerco de protección no pudo ser quebrado por eventuales proveedores.

Tras realizar la semana pasada sus primeras salidas recreativas, como practicar un poco de golf, su nueva pasión, y participar de un partido de fútbol con amigos, la expectativa de Diego era ir el domingo a ver el partido Argentina-Paraguay por las eliminatorias para el Mundial. Pero los médicos se opusieron a su deseo para evitarle un eventual golpe emocional que complique el tratamiento. A modo de compensación, fue autorizado a ver el partido en la casa de sus padres, junto a su familia. (AFP)