Detenidos por el robo a un geriátrico

Un joven excarcelado de Coronda y una menor cayeron por el golpe de hace 10 días en Santa Fe al 1500

Un muchacho de 23 años y una chica de 17 fueron detenidos y acusados de participar en el asalto a mano armada de un geriátrico céntrico la semana pasada. Los arrestos se produjeron luego de que dos mujeres, amenazadas y despojadas en el local de Santa Fe 1554, reconocieran en álbumes fotográficos a ambos como participantes del atraco. La Justicia, hasta ayer, no había establecido sus presuntos roles en el golpe. El joven detenido, según la policía, salió de la cárcel de Coronda hace tres meses.

El 26 de mayo pasado dos hombres armados irrumpieron en el geriátrico Jardín del Centro. Luego, con la llegada de una mujer, encañonaron a la dueña y a la supervisora. Estuvieron alrededor de 30 minutos sin que las enfermeras y los ancianos se enteraran de lo que sucedía. Sin lastimar a nadie, juntaron cinco mil pesos entre efectivo y cheques. Se retiraron dejando a sus víctimas encerradas en una oficina.

Luego de examinar los libros fotográficos de la Sección Análisis Delictivo, la directora del geriátrico y la empleada coincidieron, según fuentes policiales, en identificar a dos personas como sus visitantes de aquel día ingrato. Ayer la Brigada de Investigaciones realizó dos allanamientos. En el primero, en pasaje Saravia al 700 (Santa Fe y Paraná) arrestaron a Alejandro Sebastián Gordillo. "Tiene múltiples antecedentes por delitos contra la propiedad y hace tres meses salió de cumplir condena en la cárcel de Coronda", dijo a este diario el comisario Néstor Ljumberg, jefe de Investigaciones.

La misma sección policial detuvo a J.G.C., una menor de 17 años, en Presidente Quintana al 100. La chica quedó a disposición de juez de Menores y recuperó la libertad. No quedó establecida la relación entre ella y el joven que permanece preso por orden del juez de Instrucción Nº 14.

Un día después del robo, la directora del albergue, Dora Wegelin, contó que la dupla masculina fue a buscar el efectivo luego de hacer una fina tarea de inteligencia. Dos días antes del robo dos hombres llegaron al asilo en Santa Fe entre Paraguay y Presidente Roca con la excusa de interiorizarse de los servicios para la futura internación de una familiar. Volvieron dos días después, con otras pretensiones. Y armados. "Eran los mismos muchachos del otro día. Preguntaron por mí, con nombre y apellido. Cuando levanté la cabeza de la computadora ya los tenía adentro, apuntándome", narró.

La policía también acudió a la casa de una mujer que, según se comprobó, había realizado una llamada de contenido vengativo un día después del golpe. Pero no tenía que ver con el robo: era una ex empleada del geriátrico, despedida siete años atrás.