Una ley para ordenar la lechería santafesina

El proyecto de ley para el sector lácteo se discutió en el Consejo Provincial de Lechería

El Consejo Provincial de Lechería (CPL) debatió con representantes de la industria y la producción el proyecto de ley provincial para el sector que promueve el gobierno santafesino. En el encuentro se analizaron las sugerencias de todas las partes y se avanzó en la inclusión de modificaciones al proyecto, que básicamente trata de establecer un esquema lechero más ordenado, transparente y predecible dentro de un marco legal.

Algunos de los temas que incluye el proyecto de ley tienen que ver con la fiscalización, la registración de los campos, la realización de auditorías en las plantas lácteas, el control de la mercadería en tránsito y en góndola, el establecimiento de normas de calidad y seguridad y promover la participación del CPL en ferias y congresos nacionales e internacionales, entre otros.

Los ítems que aún no fueron incluídos se refieren a cuestiones sensibles tanto para la industria como para los productores. Por ejemplo, el tema precios casi no es discutido porque en cada encuentro que se trata aparece el caos y no se arriba a ninguna conclusión. Sin embargo, se mantiene en la lista de temas pendientes y ambas partes dieron muestras de que pretenden acordar sobre esta cuestión.

La reunión, que se realizó en el Salón Amarillo del Ministerio de la Producción en Santa Fe, fue presidida por el secretario de Agricultura, Ganadería y Recursos Naturales, Luis Tanino. También asistieron el subsecretario de Producción Agroalimentaria, Daniel Costamagna, funcionarios y técnicos del ministerio y representantes de la producción e industria láctea.

Además participaron a representantes de Carsfé, Junta Intercooperativa Productores de Leche, Federación Agraria Argentina, Coninagro, Centro Industria Lechera, Inta, Centro Investigación en Tecnología Industria Láctea, Federación Centros Tamberos, Control Lechero, Asociación Productores de Leche Santa Fe, Colegios de Médicos Veterinarios y de Ingenieros Agrónomos, Facultad de Ciencias Agrarias y de Ciencias Veterinarias de Esperanza y Dirección de Bromatología.

Luego del encuentro, Costamagna explicó que el proyecto de ley contempla continuar trabajando fuertemente en la fiscalización para reforzar la calidad y la higiene alimentaria y también para cubrir los aspectos previsionales e impositivos y así evitar la lechería marginal.

"Queremos brindar mayor transparencia al sector y eso se hace teniendo datos, Santa Fe cuenta con estadísticas pero no están sistematizadas, además pensamos unir la información nuestra con la de otras provincias lecheras", indicó.


Un tema pendiente
Uno de los temas que aún no está incluido en el proyecto y que ha desencadenado más de un conflicto entre la industria y la producción tiene que ver con el precio. Sin embargo, se intenta incorporar un marco de referencia.

El subsecretario precisó que esto no significa establecer precios testigos ni que el Estado los fije sino que los precios se definan teniendo en cuenta los costos de producción primarios, de producción industrial y los distintos precios de los productos lacteos en el mercado interno y externo.

Por su parte, Roberto Socin, de la mesa de productores tamberos, indicó que la industria y los productores deben encontrar una metodología para fijar los precios y la ley debe contener un mecanismo para solucionar posibles conflictos entre las partes. No obstante, destacó que este uno de los temas más difíciles de tratar y que por eso se demora el arribo a un acuerdo: "No debemos mezclar la coyuntura con lo estructural", precisó.

El funcionario del Magic también indicó que se avanzó en la incorporación de una liquidación unica en todo el país, es decir que todas las industrias tenga un mismo esquema para liquidar la leche y así habría mayor claridad en lo que se cobra, actualmente la liquidación es diferente en cada industria y para los productores se torna compleja la comparación.

Asimismo, Costamagna señaló necesario el establecimiento de laboratorios referenciales, los cuales deberían funcionar como la Cámara Arbitral de Cereales pero para dirimir conflictos entre los productores y la industria lechera.