Díaz Bancalari asegura que el PJ se mantendrá unido en apoyo al presidente

"Hay egoístas que piensan que a Kirchner le tiene que ir mal para rédito propio"

Según el jefe de la bancada peronista en Diputados, hay exponentes "transversales" que apelan al doble discurso

Javier Felcaro / La Capital

José María Díaz Bancalari no se cansa de repetir que el destino del justicialismo está atado a la suerte de Néstor Kirchner. "Somos conscientes de la responsabilidad que nos confió la sociedad. El PJ se mantendrá unido en apoyo al gobierno, no por una cuestión partidaria sino de patriotismo", aclara.

Sin embargo, el jefe de la bancada peronista en Diputados, hombre de confianza de Eduardo Duhalde y, a la vez, interlocutor del patagónico, descubre sus reparos cuando La Capital le menciona a los aliados de la Casa Rosada: "Los transversales tienen un actitud curiosa. No conozco a nadie que ayude a un gobierno rechazando sus iniciativas legislativas. Muchos de los que llaman a apoyar no sólo votan de ese modo sino que expresan su oposición a la gestión de Kirchner".

-¿La falta de conducción en el justicialismo es por tiempo indeterminado?

-No creo que se extienda mucho tiempo más. Entiendo que Kirchner debe presidir el partido, aunque él no lo tome como una actividad central. Pero la sociedad sabe que en abril de 2003 el PJ le dio un jefe del Estado. Y, si el peronismo está gobernando, es bueno que el presidente dirija el partido.

-Descarta, entonces, un estado de acefalía.

-Sí. Además, hablando claro, (Kirchner) hoy lo conduce de hecho. El estar permanentemente en la dinámica de resolución de problemas que no son menores para los argentinos hace también que tenga la dirección del partido. Hay una estructura política-institucional que incondicionalmente lo apoya, como ocurre en el ámbito legislativo. En el plano Ejecutivo, los gobernadores están trabajando en conjunto con el presidente, y me parece que todos llegaron a la decisión de encolumnarse en el esfuerzo de sacar adelante al país.

-Se dijo que Kirchner testeó la posible intervención del peronismo y que, al mismo tiempo, Eduardo Duhalde, siguió fogoneando internas para consensuar una lista única.

-Son versiones. A Kirchner jamás se le ocurrió intervenir el PJ. Quiere encontrar una solución, a través de internas o no descartando hallar un grado de consenso, lo que no significa un toma y daca. Implica decir "esta es nuestra lista hacia adentro del partido; el que entienda que puede sumarse, bienvenido sea, y el que crea que puede competir, también". Aunque, de haber una nómina encabezada por el presidente, será muy difícil que alguien intente enfrentarlo.

-¿Parque Norte fue una gran peluquería?

-Es una lástima que hayan aparecido algunos vestigios de intolerancia. Yo no diría eso, porque sería faltarles el respeto a tres militantes del sector femenino (Cristina Fernández de Kirchner, Hilda Chiche Duhalde y Olga Riutort), que tienen su propio peso y forma de construir. Sería una visión machista y descalificadora. Es cierto que podríamos haber avanzado en la discusión, porque el PJ se debe un debate desde hace tiempo. Esta discusión se debe realizar en un ámbito cerrado, en el sentido de que las cuestiones vinculadas con la identidad y la definición de liderazgos aparezcan como propias del PJ.

-Con el acto en la Esma, Kirchner buscó disciplinar a los gobernadores, pero también se ganó algunos rencores.

-Para mí hubo un malentendido. Lo que realmente se quería desde el gobierno es un acto de todos y no de un sector. Pasó lo que pasó, apareció la solicitada y se produjo un intercambio de opiniones. A la verdadera historia la tenemos que analizar algún día, pero no podemos estar permanentemente mirando hacia atrás. No creo que provoque heridas mayores conocer la verdad pública y no la publicada.

-También quedó claro el choque entre el PJ estructural y la "transversalidad".

-Los transversales tienen un actitud de lo más curiosa: no conozco a nadie que ayude a un gobierno votándole en contra sus iniciativas legislativas. Y hasta ahora muchos de los que llaman a apoyar no sólo votan de este modo sino que expresan su oposición a la gestión de Kirchner. Cuando estaban en campaña para ser diputados declaraban su coincidencia al pie de la letra. Si uno utiliza tal posición para encaramarse en determinado lugar, no es bueno terminar defraudando a quienes inocentemente los acompañaron pensando que respaldaban al Ejecutivo.

-¿Cree que Kirchner quiere sacar los pies del partido?

-El peronismo siempre necesitó la construcción de frentes nacionales y populares, si bien es el eje motor de ese pensamiento. Y está bien que el presidente busque e incluso integre al gobierno a representantes de otros partidos. El país merece una arquitectura de conjunto en la que debemos estar todos. No creo que Kirchner piense en una construcción de este tipo por afuera del partido, porque sería un error.

-El PJ de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba son reacios a ceder espacios en la conducción.

-Además, en esas provincias, los que se definen como transversales u oficialistas son los más acérrimos adversarios. El gobernador Jorge Obeid me lo expresó claramente, y sé perfectamente quiénes le hacen oposición. Uno los ve allá y parece que en su momento acompañaron a Kirchner. Lo mismo ocurre en Córdoba, y en Buenos Aires conocemos a los que quieren que no se resuelvan los tremendos problemas que hay, no por estar mal administrada sino porque es la mitad del país.

-Igual queda la sensación de que el justicialismo se encuentra en estado de ebullición...

-Está la ilusión, en aquellos que en forma egoísta piensan que a Kirchner le tiene que ir mal para rédito propio, que el peronismo se divida y debilite al Ejecutivo. Pero somos conscientes de la responsabilidad que nos confió la sociedad. El PJ estará a la altura de esa generosidad y se mantendrá unido en apoyo al gobierno, no por una cuestión partidaria sino de patriotismo.

Según Díaz Bancalari algunos apelan "al doble discurso".