Juan Pablo II celebró la vigilia pascual

El Papa Juan Pablo II concelebró anoche en la basílica de San Pedro la vigilia pascual, que conmemora la resurrección de Cristo, a la que calificó de "madre de todas las vigilias del año litúrgico". Muy debilitado por la enfermedad de Parkinson, Su Santidad, quien cumplirá 84 años en mayo, llegó al altar sentado en su sillón especial.

Juan Pablo II lucía más cansado que los días anteriores debido al parecer a las celebraciones de Semana Santa, en las que tuvo que reducir su participación a causa de su estado de salud.

Veinticuatro cardenales concelebraron la misa de la vigilia de Pascua, pero Su Santidad bautizó personalmente a siete nuevos católicos procedentes de Italia, Japón y Togo. "Vuestros orígenes dejan patente la universalidad de la llamada a la salvación", dijo.

"A través del bautismo formaréis parte de la Iglesia, que es un gran pueblo, sin fronteras de razas, de lenguas ni de culturas, llamado a convertirse en una bendición en medio de todas las naciones de la Tierra", afirmó.

La ceremonia comenzó en el atrio con la tradicional bendición del fuego y la preparación del cirio pascual. Luego, el Papa entró en procesión en una basílica a oscuras en la que miles de fieles encendieron progresivamente sus velas después de que lo hiciera Juan Pablo II y a continuación se prendieron las luces del templo.

Un diácono anunció la resurrección de Cristo cantando el Exsultet Jam Angelica Turba, uno de los más antiguos himnos gregorianos de la Iglesia.

Al cantar el Gloria, las campanas de la basílica de San Pedro, seguidas por las de Roma, fueron las primeras en anunciar al mundo la resurrección.

"Como evoca el cántico del Exsultet, esta noche memorable nos hace recorrer de nuevo la evolución de la humanidad, desde la creación hasta el acontecimiento culminante de la salvación, que es la muerte y la resurrección de Cristo", dijo el Santo Padre en su homilía.

El Sumo Pontífice oficiará hoy en la plaza de San Pedro la misa solemne de Pascua, retransmitida por las televisiones de 52 países, y dará su bendición urbi et orbi (a la ciudad y al mundo).

Según fuentes fidedignas del Vaticano, el Papa hará un llamamiento por la paz mencionando la situación en Irak y en Tierra Santa, así como las consecuencias de los actos terroristas y las guerras "olvidadas" en Africa.


Inusitadas medidas de seguridad
En Roma se incrementaron considerablemente las medidas de seguridad por miedo a posibles actos terroristas, aunque las autoridades evitan el alarmismo.

A lo largo de la víspera, las autoridades italianas se esforzaron por minimizar informaciones señalando que se iba a producir una explosión en Italia y que un comando se estaba dirigiendo a Roma.

Durante la semana, el ministro del Interior anunció que el número de objetivos sensibles había pasado a 13.421 frente a los alrededor de 8.000 anteriores.

Unos 13.000 policías y 4.000 militares se encargan de su vigilancia. Son iglesias, centros de culto, aeropuertos, estaciones de metro y ferrocarril y grandes ciudades turísticas como Roma, Florencia, Venecia o Pisa. (AFP)

Su Santidad bautizó personalmente a siete nuevos católicos.