La firma de Villa Gobernador Gálvez ya vendió unas 20 unidades

La fábrica de acoplados Montenegro tomó a 20 obreros y volvió a producir

Tras cuatro años de inactividad la emblemática empresa está nuevamente en las rutas argentinas

Norberto Puntonet / La Capital

Villa Gobernador Gálvez. - La emblemática fábrica de acoplados Montenegro, que desde hace cuatro años permanecía cerrada, volvió a abrir sus puertas e incorporó a una veintena de ex operarios. Los nuevos dueños señalaron a La Capital que ya vendieron algo más de 20 equipos y que "sólo faltan ajustar algunos detalles para salir al mercado a tratar de recuperar el terreno perdido durante estos años".

Los empresarios Daniel Frontalini, un repuestero de Rosario; y Alberto Ciavatari, dueño de una fundición en Arroyo Seco, compraron la quiebra de la famosa empresa hace dos años, pero recién en enero pasado obtuvieron la licencia de configuración de modelo para poder comercializar los acoplados, el primero de ellos vendido a un transportista de San Genaro. "Fueron años muy duros para nosotros porque no podíamos producir y para los operarios que estaban todavía sin poder trabajar. Desde hace unos ocho meses fuimos incorporando a los muchachos para realizar tareas de ajuste y puesta a punto de las máquinas que estuvieron paradas tanto tiempo", señaló Frontalini.

La empresa -ubicada en avenida San Martín al 2800- había cerrado sus puertas a principios de 2000 con una producción que no llegaba a las 12 unidades mensuales. Cuatro años más tarde la fachada de la fábrica ya cambió su fisonomía con la exposición de tolvas y acoplados recién pintados y listos para la venta, que contrastan con el primer equipo producido por la firma, con su carrocería de madera y pintada de rojo.

Montenegro llegó a tener hasta 300 empleados a fines de los años setenta y a producir unas 70 unidades por mes. Pero la debacle financiera que sufrió el país en los últimos años y el mal manejo de los antiguos dueños hicieron que sólo medio centenar de obreros terminaran trabajando en la planta. Tras su cierre, los trabajadores tuvieron que poner una carpa frente a la empresa para custodiar los bienes y así evitar el posible vaciamiento.


Panorama alentador
Los empresarios contaron que ya trabajan 20 personas, en diferentes grupos desde las siete hasta las las 17, y que en los próximos días incorporarán a otras cuatro. En la planta, además de unidades ruteras, también se fabrican tolvas autodescargables para el agro, las que ya habían comenzado a venderse durante el año pasado "porque estos vehículos no necesitan patentamiento", explicó Frontalini para agregar que tienen intenciones "de fabricar otra tolva para abastecer a las sembradoras con semillas y fertilizantes a granel", adelantó Frontalini.

"El mercado está hambriento de acoplados y sólo faltan realizar unos trámites administrativos para poder salir a pelear el mercado. Sabemos que hay unas 15.000 unidades Montenegro rodando por las rutas argentinas y seguramente los transportistas que ya conocen la marca tienen la intención de renovar sus unidades", explicó por su parte Ciavatari.

Ciavatari señaló que ya registraron la marca en Brasil, Venezuela, Paraguay, Uruguay, Bolivia y Perú. "Parafraseando el viejo eslogan, lo que queremos ahora es que los acoplados viajen desde Caracas a Río Negro", fantaseó el empresario al recordar aquel famoso eslogan que popularizó el recordado locutor comercial Cayetano Licco en la vieja cancha de Rosario Central.

La planta llegó a dar trabajo a casi 300 operarios.