Es un enigma quién mató y por qué razón a Natalia Di Gallo

No pudieron determinar la causa de la muerte de la chica del parque Pereyra

Lo impide el estado del cuerpo. Pero no dudan de que fue asesinada. El chico que estaba con ella aparece comosospechoso, pero su relato es creíble: repite que un ladrón se llevó a su amiga y a lo encerró en el baúl del auto

Buenos Aires.- Los resultados de la autopsia practicada a Natalia Di Gallo, la joven de 16 años cuyo cadáver fue encontrado antenoche en el parque Pereyra Iraola de La Plata, cerca de donde había desaparecido hace cuatro días, descartaron que los golpes que recibió en la cabeza le hayan provocado la muerte, por lo que se ordenaron nuevos estudios para determinar la forma en que fue asesinada.

Las causas del deceso no pudieron establecerse aún por el estado de putrefacción que tenía el cadáver. En tanto, Nicolás Gómez, el joven de 19 años que vio por última vez a la adolescente con vida y para la familia es el principal sospechoso, está en la mira de los investigadores. "Pero su relato sobre lo ocurrido no tiene fisuras", dijo el fiscal del caso. "No hay en la causa ninguna prueba que destruya su versión", señaló un alto jefe policial.

De acuerdo a la información revelada por el fiscal de Quilmes, Claudio Pelayo, la autopsia tampoco pudo determinar si la víctima había sido abusada sexualmente. Por su parte, una alta fuente judicial del caso reveló que los dos médicos forenses que realizaron el estudio le comunicaron telefónicamente a Pelayo que, "por el estado de putrefacción del cadáver, tampoco fue posible practicarle un hisopado para determinar si había rastros de semen" que indiquen que la chica fue víctima de un ataque sexual.

"Los golpes que sufrió en la cabeza no causaron su muerte. La conclusión de los forenses es que no se encontró ninguna lesión ni externa ni interna", como signos de estrangulamiento, señaló el fiscal.

Por esa razón se tomaron muestras para realizar unos 25 estudios microscópicos anatómicos, histopatológicos y toxicológicos, entre otros, a fin de determinar cómo fue el deceso.

Una versión indicaba que la adolescente habría muerto al recibir cuatro fuertes golpes en la cabeza, y otros en el resto del cuerpo, y existía indicios de que pudo haber sido sometida a violencia sexual.

Más allá de las incógnitas en torno a las causas del deceso, para los investigadores Natalia fue asesinada, a tal punto que el fiscal calificó el caso como "privación ilegal de la libertad, seguida de muerte y robo calificado", una de las más graves que contempla el Código Penal y que prevé penas de hasta reclusión perpetua.

En medio de profundas muestras de dolor, los restos de Natalia fueron velados ayer en una casa de sepelios de Florencio Varela, donde la chica vivía junto a sus familiares, quienes volvieron a apuntar sus sospechas hacia Nicolás Gómez.

La hermana de la chica asesinada, Gabriela Di Gallo, dijo a la prensa que Gómez "no era el novio" de la joven y que "sólo había salido con él dos veces, ya que lo conocía del colegio". También sostuvo que tenía "antecedentes policiales".

Sin embargo, el padre de Gómez salió en defensa de su hijo al sostener que "entiendo a la familia porque están dolidos, pero algunos periodistas están afirmando cosas que no son ciertas", en referencia a las versiones sobre los supuestos antecedentes (ver aparte).

Otra de las denuncias de los familiares de las víctima indicaban que Gómez sería íntimo amigo del ex novio de Natalia, quien ya declaró en sede policial, y a quien el fiscal no descartó volver a citar.

El cadáver de Di Gallo, envuelto en una bolsa de plástico, fue encontrado antenoche en un zanjón, a 300 metros de una de las entradas del parque Pereyra Iraola. El predio está delimitado por el camino General Belgrano y la ruta nacional Nº 2. El hallazgo se produjo durante un tercer rastrillaje realizado por la policía bonaerense en la zona, luego de que en dos oportunidades anteriores no tuvieran resultados.


El crimen fue en otro lado
Los investigadores policiales consideraban casi probado que la chica no había sido asesinada en el lugar donde se encontró el cuerpo y que el cadáver fue colocado allí luego que se rastrillara la zona.

El jefe de la Departamental de Quilmes, comisario inspector Roberto Díaz, sostuvo que existen "muchos elementos que llaman la atención", entre ellos que el lugar del hallazgo del cuerpo había sido rastrillado "totalmente".

Por su parte, el fiscal precisó que el cuerpo de la víctima tenía "mal colocado el pantalón", con algunos botones desabrochados y más bajo de un lado de la cadera que del otro, "como si lo hubieran bajado parcialmente".

Pelayo volvió ayer a tomarle declaración a Gómez para reconstruir los últimos momentos con vida de la chica y luego se realizó un cronometraje basado en el relato para determinar la veracidad de su versión sobre el trayecto que realizó en el auto con la chica y el tiempo que le insumió.

De acuerdo con la versión del joven, el último domingo había ido a buscar a Natalia en su Renault 11 para llevarla a cenar pero, como no le alcanzaba el dinero, optó por estacionar el auto en una calle interna del parque para conversar.

En ese momento apareció un hombre que rompió el vidrio del acompañante con intenciones de robarle el auto y, como no podía hacerlo arrancar, lo encerró en el baúl y se llevó a la chica, aparentemente a pie, ya que no escuchó ruido de motor.

"Preliminarmente no encontramos ninguna fisura en sus dichos", admitió el fiscal respecto del único testigo del hecho, aunque reconoció que el joven es "cuestionado" por la familia de la víctima.

La Unidad Fiscal que trabaja con la DDI de Quilmes dispuso una pericia completa sobre el vehículo y un análisis espectrofotométrico de las ropas del muchacho.

De esa pericia, suponen los investigadores, podría surgir si hay rastros de vidrios de la ventanilla del rodado en las prendas y también cómo llegaron allí, la trayectoria de las astillas e, incluso, restos del elemento contundente que habría sido usado para romperlo. (DyN-Télam)

Juan Di Gallo, el papá de la chica asesinada.