Charlas en el Café del Bajo

-Anoche ensayé una definición del amor, Inocencio acaso distinta y audaz. Se la leo y después voy a leerle las palabras que nos están enviando los lectores: "Amar es estar lejos de vos y extrañarte, hasta la necesidad de traspasar el tiempo y el espacio sólo para mirarte. Amar es sentir que tu desaire quiebra al alma, pero aún así advertir que el corazón le ordena a la razón que tenga calma. Amar es regalar una sonrisa a pesar de tu enfado, porque no obstante el enojo uno se sabe amado. Amar es... tolerar tu defecto, porque después de todo él jamás brillará más que tu afecto. Amar es poder decirte: he pecado y aún así sentir que sigo siendo amado. Amar es enojarnos y al cabo de una pausa sonreírnos y abrazarnos. Amar es... esperar con paciencia ese instante en que se alza un himno que dice: sos mi amigo, mi esposo, mi amante. Amar es despertar una mañana y decirte: No te lo dije aún, pero te amo, te amo sin ningún reclamo. Amar es escuchar esta respuesta: Querido, ¿acaso no lo has dicho por montones en cada una de tus buenas acciones? Amar, y a pesar de la falta, es guardar el compromiso de cuidarte y cuidar el sentimiento, porque si vos partieras o él desvaneciera, ¿quién podría soportar el sufrimiento? Amar es, al fin y al cabo, enamorarte, pero a partir de amarte. Amar es quererte como sos; así... toda, descubrir en tu totalidad la más hermosa oda".

-¡Qué romántico, Candi! Le leo las cartas de los amigos: "Apreciado Candi: sus Charlas en el Café de Bajo muchas veces concentran mi mayor atención cuando por las mañanas, junto al café, empiezo a leer vuestro diario. Deseo darle mi definición de amor: «Es una expresión de belleza que el mundo no podrá nunca tocar». Yo también escuché estas palabras siendo joven, y aún hoy, pese al tiempo transcurrido, las recuerdo con un sentimiento emocionado y me parece son esencia del amor. Candi, su invitación a escribirle me regresó, por un breve tiempo, a casi 60 años atrás. Gracias. Juan Carlos Ferreras".

-Marcelo Mondino nos dice: "Amar es dejar de pertenecerse" y añade: "El amor dado por el sentir del alma no debe traicionar nuestra conciencia y creer que nos pertenece. El amor no es una moneda de cambio, no es para sufrirlo, es para gozarlo, no es efímero y siempre ocupa aún después de trascender un espacio en el alma. Se ama a la naturaleza, se ama a la vida, se ama a una mujer como también a un amigo. En memoria de mi amigo, incondicional en todas las circunstancias de nuestras vidas que llenó un espacio y desparramó su alegría quiero brindar su homenaje al amor, aunque solo era un perro: Puppy. Lealtad, fidelidad, pureza, perdurabilidad hasta el último suspiro de su vida, si lo encuentras en un ser humano descubrís el amor". Muy hermoso, de verdad.

-Otra carta, y otra definición que me gustó muchísimo. Es de David Gangarossa: "El amor es una decisión. Sí señor. Lo que yo siento por la persona amada no puede morirse un día, porque como decía Jorge de Seta, hay que demostrar con hechos lo que uno siente y uno decide hacerlo. El amor es poner "honor en acción", la persona amada debe ser también honrada, y esa honra hace que yo decida cada día -no importa lo que digan mis sentimientos por la mañana- amarla y respetarla, porque ese es otro ingrediente del amor. En realidad el amor es un conjunto de varias cosas, pero fundamentalmente es una decisión."

-Vamos a seguir reproduciendo las cartas que nos están enviando. Y antes de despedirnos con un poema bellísimo del dominicano Miguel A. Peguero, te decimos amigo, amiga: no te canses de amar, aunque te duela, aunque te sientas defraudado. Ese dolor no viene solo, trae en sus alforjas la semilla de ese amor necesitado. He aquí el hermoso poema: "Amor callado, que jamás se queja;/amor que, en la discreta madrugada,/sólo acierta a poner, junto a tu reja,/la ilusión de una estrofa perfumada./Amor de un alma taciturna y vieja;/amor que es como música olvidada,/que tiene azul resignación de oveja,/que lo da todo y no pide nada./Amor es eso, amar como te amo,/sin medir tu desdén, sin que un reclamo/haga que el alma de esperanza estalle./Amor sin arrebatos y sin ruido,/que espera que tu hogar esté dormido/para pasar entonces por tu calle". Hasta mañana ¡y mucho amor!

Candi II