| miércoles, 17 de diciembre de 2003 | Newell's se quedó en el intento Gustavo Conti / La Capital Los equipos no se arman de un día para el otro, por más grandes figuras que tengan. Necesitan tiempo para amalgamarse y eso les puede llevar un campeonato tranquilamente. Newell's creció en este torneo Apertura, de eso no hay dudas, pero menos de lo que muchos esperaban. De eso tampoco hay dudas. En el equilibrio que hay que encontrar entra una idea y la otra, hay que decir que lo que dejó abierto este conjunto rojinegro es el crédito para que pueda explotar en el Clausura que viene. Ese quizás es el balance del certamen que acaba de finalizar.
Claro, el hincha de Newell's no estaba dispuesto a esperar tanto, más porque pensaba que el centenario lo iba a festejar en grande. Pero no sólo no fue así sino que tampoco se alcanzó un segundo o un tercer decoroso lugar, pese que de haber ganado en la última fecha hubiera llegado detrás de Boca y San Lorenzo. Evidentemente, nadie pensaba en un 6º puesto final y que sólo superaría la paupérrima campaña anterior (15º) en 7 puntos.
Tampoco fue alentador terminar debajo de Central en 2 puntos y de equipos que se suponen inferiores como Banfield y Quilmes, aunque hay que mencionar también que sólo perdió con San Lorenzo de los 5 equipos que lo superaron en este Apertura, mientras que le ganó al campeón (Boca) y al 4º (Quilmes), e igualó con el 3º (Banfield) y el 5º (Central).
La campaña entonces no fue inaceptable, principalmente porque, más allá de los números, Newell's mostró signos de que pudo transformarse en candidato. No logró regularidad en su juego pero por momentos, en los partidos más difíciles como el de River en la 3ª fecha en el Monumental y el de Boca en el Coloso, apareció el equipo que todos esperaban. Eso es un claro síntoma de que hay una base que puede consolidarse en el Clausura. Y para eso no queda otra que apuntalar este proceso.
En el análisis individual (ver aparte) se pueden encontrar las causas por las cuales Newell's no pudo ser constante, y hay que decir que cuando un club elige el camino de los refuerzos masivos para lograr resultados, la posibilidad de que no se den inmediatamente es muy alta, como le pasó a los rojinegros luego de aquella gran campaña con Zanabria al mando.
Por eso, el mejor camino es no perder la paciencia. La clasificación a una copa está al alcance de la mano, sustentable sobre todo por la expectativa de que, ahora sí, Newell's puede explotar. enviar nota por e-mail | | Fotos | | |