| miércoles, 10 de septiembre de 2003 | Fuera de control Familiares de los tres imputados por el crimen de la maestra Fabiana Gandiaga protagonizaron un escándalo que incluyó acusaciones cruzadas, insultos, golpes de puño, ataques de nervios y hasta una amenaza de muerte para la hija de la presidenta del tribunal.
Con la lectura del veredicto, la primera en reaccionar fue la madre de Vallejo, quien lloraba desconsoladamente al grito de "¡Mi hijo es inocente, me quiero ir con mi hijo, los voy a matar!", tirada en el piso de la sala de audiencias. Y en la puerta de entrada de los tribunales, el tío de Vallejo le pegó una trompada en el rostro al padre de Antúnez, la policía los separó y los aires se tranquilizaron.
Luego fue el turno de la madre de Vallejo, quien en un nuevo ataque de nervios se revolcó por el cordón de la vereda. Y cuando todo parecía más sereno Liliana Daniele de Antúnez, madre del condenado Antúnez, dijo a la que la hija de la jueza Beatriz Bistue de Soler la había golpeado y tomado de los pelos.
Su hija y hermana del condenado, Laura Antúnez, amenazó de muerte a la hija de la jueza y le advirtió que se cuide porque va a averiguar su dirección para ir a buscarla y matarla. enviar nota por e-mail | | |