Primera C

Argentino manejó la pelota y por eso goleó a Lamadrid

Javier Parenti / La Capital

Si le dejan manejar la pelota y le dan espacios, Argentino los liquida. En estos dos conceptos está la clave del triunfo. El equipo cuenta con este gran argumento de juego y por eso nadie debe dudar de que es y será un gran candidato. Y esta sentencia no sólo se sostiene por el 4 a 0 con el que despachó a Lamadrid sino por cómo llegó a este resultado, por las características de sus ejecutores y hasta por los números del torneo, que hoy muestran al equipo sólo por debajo de Sacachispas, ante quien cayó, pero con un rendimiento en ascenso que invita a ilusionar.

Claro que no siempre va a tener espacios, como le pasó en la primera media hora ante el carcelero de Lamadrid. Pero entonces fue cuando apareció la experiencia del equipo para no desesperar, cuando empezó a tocar en busca de los espacios y del momento propicio para dar las estocadas de gol.

La primera llegó tarde en minutos, iban 41', pero en tiempo justo para empezar a edificar el triunfo. Cuando Jorge García se hizo de la pelota y levantándosela al arquero -lo dejó fuera del área-, la fue a buscar al palo derecho para definir, sin embargo privó el hambre de gol de Vázquez para mandarla al fondo del arco.

Era justo. Porque Rubio equilibraba bien el mediocampo, Chacón se agrandaba por derecha, Villarreal acompañaba, los tres defensores estaban firmes y los tres de arriba hacían lo suyo, buscando el lugar propicio para lastimar. Se perdieron una chance cada uno, pero la más clara fue la única que ganó el arquero visitante ante un remate de Theyler, a los 23'.

Lamadrid mostró lo suyo, que es lo típico de la categoría. Dos centrales que raspan, un nueve mañero, garra y ganas. Claro que también tuvo su chance, pero apareció Andrada con una tapada fenomenal ante un remate a quemarropa de Rearte, tras un rebote que quedó boyando en el área a los 27'.

Ya ganador y con algunas recomendaciones tácticas en el vestuario, los albos terminaron de adueñarse de la situación. Rubio y García no pudieron gritar pero si lo hizo Chacón, con un definición brillante (ver aparte) que aseguró el triunfo a los 61'. Sólo restaba esperar que Lamadrid se desesperara por descontar para, con esos espacios que el sala buscaba, redondear el resultado en forma contundente. Como sucedió con las conquistas de Genesio y Amaya en los diez minutos finales.

El salaíto gritó cuatro goles y estuvo bien. Pero no importa tanto la cantidad sino cómo los conquistó, que es lo que realmente cuenta para sostener y mostrar que Argentino tiene bien ganada la chapa de gran candidato.
Síntesis
Argentino 4: Andrada 7; Aceto 6, Sciretta 7 y Bassani 6; Chacón 6 (71' M. Verón 6); Rubio 7; Villarreal 6 y Faría 6; J. García 7 (69' Genesio 6), P. Vázquez 6 y Theyler 6 (78' Amaya). DT: Pablo Marini.

G. Lamadrid 0: Cardozo 4; Canteros 4, Luzzi 4, Alesandrello 5 (59' Rossi 5) y Giménez 4; De Lima 4, Ortiz 5, Zavala 5 y Koegler 4 (64' Cerenza 5); Latrechiano 5 (60' Carloni 5) y Rearte 4. DT: Jorge Franzoni.

Estadio: José Martín Olaeta.

Arbitro: Adrián Venturi (5).

Goles: 41' Vázquez, 61' Chacón, 84' Genesio y 89' Amaya (A).

Expulsado: 81' Rearte (L).

Theyler salta para que la pelota pase por abajo.