| domingo, 10 de agosto de 2003 | Para revivir la epopeya del Libertador San Martín El próximo domingo se conmemora un nuevo aniversario de la muerte del general José de San Martín,que en 1817 comandó el cruce de los Andes. Tras los pasos del Libertador Un sueño de libertad que se convirtió en una de las epopeyas más notables de la historia de la humanidad. Sin puentes, ruta asfaltada ni túneles que atravesaran las montañas, el general José de San Martín y sus tropas cruzaron la cordillera de los Andes. Las seis columnas de la avanzada criolla partieron desde la región cuyana con destino a Santiago de Chile. La exigente travesía se desarrolló por senderos de cornisa y utilizando mulas para transportar la artillería pesada. A más de 180 años del cruce histórico, las Rutas Sanmartinianas proponen seguir los pasos del ejército criollo que logró liberar a los pueblos latinoamericanos de la corona española.
El próximo domingo, 17 de agosto, se conmemora un nuevo aniversario del fallecimiento del general José de San Martín. ¿Se anima a ensillar una mula para revivir la epopeya libertadora? No hay tiempo que perder, comencemos a galopar por las empinadas pendientes de la cordillera.
Seis rutas Debido a las crudas condiciones climáticas del invierno andino el plan de invasión que ideó San Martín se inició en enero de 1817 a través de seis pasos andinos simultáneos. Hoy es posible revivir la travesía participando del cruce de la cordillera que organiza la Asociación Cultural Sanmartiniana Cuna de la Bandera desde hace unos años. El próximo mes de enero se realizará el "6º cruce de los Andes a lomo de mula por los 6 pasos".
De esta manera se atravesarán todas las rutas utilizadas por el general San Martín en su campaña libertadora, en un hecho sin precedentes en el mundo. Un cruce jamás realizado desde 1817. El objetivo es desandar los mismos pasos andinos que se extienden a través de las provincias de Mendoza y San Juan, a lo largo de 750 kilómetros sobre la frontera con Chile.
Luego todos los expedicionarios se dirigirán al Cristo Redentor para compartir la ceremonia final. Se estima que podrán intervenir 250 jinetes. El costo aproximado de la expedición será de $ 1.000 por persona.
Un dato evidencia la proeza del cruce original. En plena cordillera y durante las noches de verano las temperaturas llegan a los 15 y 20 grados bajo cero. Incluso durante el día las marcas térmicas descienden hasta los -2. En estas condiciones climáticas los criollos tuvieron que dormir a lo arriero durante varias noches, usando por cama la montura y el poncho.
Para protegerse del frío se adoptaron estrategias acertadas, entre ellas, la de confeccionar calzados para abrigar los pies. Fueron hechos con desperdicios de cuero de las reses y estaban forrados en el interior con trapos de lana.
También se suministró abrigos a los animales que participaron de la travesía. Los caballos, mulas y vacas lucían la llamada enjalina chilena o abrigo forrado en pieles. Las protecciones forradas de paja fueron desechadas debido al peligro de que los animales las comieran por la falta de otra alimentación en el trayecto.
Hoy quienes pretenden seguir los pasos del ejército Libertador disponen de un sofisticado equipo. Botas de trekking, guantes, polar y bolsas de dormir térmicas son algunos de los elementos diseñados especialmente para los amantes del turismo aventura, infaltables en esta excursión andina.
A más de 180 años del histórico cruce existe la oportunidad de revivir la odisea. La silueta de los Andes, el cielo azul infinito y los cóndores que dibujan círculos en el aire enmarcan un paseo cargado de emociones, por este paraje agreste, donde se abrió un sendero de libertad. enviar nota por e-mail | | Fotos | | La base militar de Puente del Inca. | | |