| sábado, 09 de agosto de 2003 | Catorce balazos a un suboficial de la bonaerense Buenos Aires.- Un suboficial de la policía bonaerense fue asesinado de catorce balazos en inmediaciones de un asentamiento de Quilmes Oeste y a 200 metros de su cadáver se halló su auto calcinado.
El asesinato, del cual hasta anoche no había testigos, fue cometido ayer a la madrugada, luego de que el cabo primero Osvaldo Ramírez, que estaba de licencia, saliera de su casa de Quilmes en pantuflas y abordara su auto Fiat Uno rumbo una zona cercana un asentamiento precario.
El ministro de Seguridad bonaerense, Juan Pablo Cafiero, dijo que el crimen del policía le genera "muchos interrogantes", ya que no se logró establecer todavía qué hacía el efectivo en esa zona a esa hora de la madrugada.
Pese a que en un principio se analizó la posibilidad de que podía tratarse de un robo seguido de homicidio, con el paso de las horas la pesquisa se orientó a una venganza: es que según lo averiguado, Ramírez mantuvo la semana pasada un tiroteo con un panadero de la villa, episodio aún poco claro.
Según lo establecido por los investigadores, el policía estaba con un permiso para faltar a su trabajo desde hacía varios días, ya que su esposa está embarazada de ocho meses y medio y estaba sufriendo pérdidas, motivo por el cual él la estaba cuidando.
Las fuentes dijeron que al policía le robaron el arma reglamentaria, mientras que en la escena del crimen se secuestraron muchas vainas servidas, que fueron derivadas a los peritos para ser analizadas. (Télam) enviar nota por e-mail | | |