El secretario de Medio Ambiente santafesino, Aníbal Vázquez, confesó estar al tanto de estos niveles de contaminación sobre los arroyos Ludueña y Saladillo, pero adelantó que a partir de este mes se instalarán estaciones de monitoreo sobre ambas vertientes del Paraná para detectar la presencia de metales pesados y los lugares desde donde se vertieron a las aguas.
"Tenemos que realizar un trabajo continuo. No sólo buscar los contaminantes en el río, sino también cruzar datos con la Municipalidad para saber qué tipo de actividades industriales se generan en la ciudad y dónde están emplazadas", adelantó el funcionario.
El municipio, la Secretaría de Medio Ambiente y Aguas Provinciales ya integraron una comisión de trabajo en conjunto para intentar poner un freno a la contaminación industrial en ambos arroyos.
"Se van a establecer puntos fijos sobre el Ludueña y el Saladillo para periódicamente tomar muestras y evaluar resultados", se comprometió Vázquez.
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La Ciudad
