Como si el Bambino Veira no tuviese suficientes problemas con algunos lesionados para armar el equipo, ayer se le sumó otro. Es que el volante Diego Villar cometió una tontera casi en el final del partido y se fue bien expulsado por Rafael Furchi. Iban 88 minutos, Fernández Di Alessio le mostró un par de veces la pelota, en una jugada intrascendente en el medio de la cancha, y el pibe -que había cumplido hasta ahí- le metió un planchazo tremendo y con mala intención. Consecuencia lógica: roja directa. Pero se ve que después se debe haber dado cuenta del error, porque a la salida del vestuario todavía se lo notaba caliente por lo sucedido y prefirió no hablar con la prensa.
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La Ciudad
