Buenos Aires (enviado especial).- La lluvia le cambió los planes al cuerpo técnico de Newell's. El agua caída entre el jueves y especialmente el viernes le impidió entrenar en la cancha de Atlanta, tal como estaba previsto, y lo que iba a ser un entrenamiento de pelota parada y ejercicios tácticos terminó siendo un fútbol-tenis y un picadito con los arcos hechos con ropa, como en el campito, en los bosques de Palermo, a unas 10 cuadras del estadio Monumental.
Durante la noche del viernes estuvieron tratando infructuosamente de conseguir una cancha para entrenar con normalidad, pero tanto Atlanta como Platense, que se las cedían gentilmente, jugaban por la tarde, entonces los rojinegros no quisieron arruinar el campo de juego unas horas antes.
Mientras el sol parecía sostener una pelea desigual con un manto de nubes impiadosas, los 18 jugadores llevaron a Palermo muchas ganas de moverse para sacudirse el frío de la ventosa mañana porteña. Luego del tradicional loco y los ejercicios precompetitivos que dan paso a la actividad propiamente dicha llegó el momento del fútbol-tenis para los 10 jugadores de campo y del picado de 4 contra 4 de los suplentes junto a Palos y Pocrnjic. El trabajo duró aproximadamente una hora y media. Pasadas las 12 del mediodía el plantel emprendió el regreso a la concentración.
Pero antes de irse de Palermo, el Bambino Veira le dijo a Ovacion que su única preocupación por estas horas pasa por conocer la formación de Boca, para de ese modo poder asignar las marcas en las pelotas detenidas. El DT está muy confiado en llevarse para Rosario un buen resultado si ponen en práctica los trabajos que efectuaron en la semana. El técnico rojinegro, quien está convencido que será bien recibido por los xeneizes, recalcó que el motivo de mantener a Liendo en lugar del pibe Villar tiene como finalidad otorgarle un poco más de experiencia y equilibrar al equipo en esa zona. Lo de la experiencia está íntimamente ligado con los debuts de Fernández, Ré y Domínguez en la Bombonera.
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La Ciudad
