El rumor se echó a rodar el martes a las 14 en Tandil. El director deportivo del Cruz Azul, Benito Pardo, se comunicó con el asistente canalla Rubén Massei para decirle que el técnico Mario Carrillo solicitaba la vuelta de Mariano Messera a México, porque no había podido conseguir el refuerzo del Patrón Bermúdez. Massei enseguida le contó lo sucedido a Russo, quien habló a Rosario con los dirigentes e ideó una estrategia junto al jugador para cuando llamaran a las 16 nuevamente desde México. El jugador atendió el llamado azteca y resolvió la situación con un "no" rotundo. "Ni loco me vuelvo a México", habría dicho Mariano. Todo terminó cuando a las 23, Juan Simón, representante de Messera, le comunicó al volante que ya estaba todo arreglado e incluso se había mandado la documentación correspondiente para cerrar el préstamo. Así también lo ratificaron los directivos auriazules ayer. Russo sintetizó lo sucedido: "Estas cosas son propias de una negociación, que lo terminó arreglando Messera con sus ganas de jugar en Central".
| |