No sólo Cataratas, Bariloche o el avistaje de ballenas en el Atlántico Sur representan las joyas del turismo que la Argentina puede mostrar puertas afuera. El desarrollo de las producciones regionales, la mayoría de las cuales representan los ingresos genuinos del país, también están en la vidriera.
La compañía Coovaeco, del grupo integrado por Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), La Segunda y ACA Salud, está trabajando en ese sentido con la idea de "mostrar las riquezas de la Argentina", según explicó el gerente general de la empresa de turismo vinculada al sector agropecuario, Wadi Bitar, aunque aclaró que "no tiene nada que ver con el turismo rural o de estancias", muy difundido en los últimos tiempos como opción para el descanso y las vacaciones.
Aprovechando las ventajas competitivas que trajo la devaluación en cuanto al tipo de cambio para ofrecer servicios al exterior, la compañía con sede en Rosario comenzó a ofrecer lo que denominan circuitos técnicos agropecuarios.
Se trata de un recorrido por las áreas productivas, que por el momento dividieron en ocho ofertas: el circuito de granos, lácteo, carnes, siembra directa, silos y puertos, maní, vitivinícola y frutihortícola.
El plan tiene como oferta excluyente la capacitación de los visitantes que recorran los circuitos. Para eso, cuentan con asesoramiento técnico de parte de especialistas vinculados a entidades de la producción, tanto públicas como privadas, como el Inta, Aposgran, Aapresid, Aprocaboa, entre otras.
Por otra parte, los coordinadores que acompañan a los contingentes extranjeros son profesionales formados en temas relacionados con la actividad que se difunde en los circuitos, además de manejar el idioma de los visitantes.
"Podemos fallar en un hotel o en una comida, pero nunca en el contenido técnico del programa", aseveró Bitar, resaltando así lo que constituye el eje esencial de la propuesta.
Por otra parte, echando mano de las programas de rutas alimentarias que desarrolla la Secretaría de Agricultura de la Nación (Sagpya), la empresa turística busca poner en contacto al turista productivo, por denominarlo de alguna manera, con los sabores de cada región a través de sus comidas, sus costumbres y la esencia de su cultura.
A la hora de hacer el balance de un año de trabajo en este segmento, Bitar explicó: hubo un factor a favor que fue el tipo de cambio y otro que jugó en contra, la imagen de inseguridad que tenía la Argentina de cara al mundo".
Ventaja cambiaria
La puesta en marcha de esta iniciativa surgió luego del abandono de la convertibilidad, que le permitió a la Argentina ofrecer paquetes turísticos a precios más competitivos en el exterior, en función del valor del dólar.
De todos modos, Coovaeco es una empresa que viene trabajando hace quince años brindando servicios esencialmente al sector agropecuario, al que también asiste el grupo al que pertenece.
"Cuando existía la paridad un dólar un peso llevábamos a contingentes al exterior favorecidos por ese tipo de cambio, con destino a ferias agropecuarias de todo el mundo como la Farm Progess Show (EEUU), Sima (París), Agrishow (Brasil) y otras en Nueva Zelanda, Australia o Europa", explicó Bitar.
Además, la empresa trabaja con la Universidad de Chicago y la Bolsa de Cereales de esa ciudad estadounidense y mediante ese convenio anualmente lleva contingentes de productores argentinos para participar de un programa de capacitación especial.
Con la devaluación, el escenario cambio. A partir de ese momento "comenzamos a pensar que tenía que haber gente en el mundo a la cual le interesara venir a ver cómo se hacía en la Argentina para producir y competir, con políticas que muchas veces juegan en contra del sector agropecuario".
De ese modo fue como desempolvaron esta iniciativa de los circuitos técnicos agropecuarios que hoy están en marcha.
Desde principios del año pasado hasta ahora unas 120 personas visitaron la Argentina seducidos por esta oferta y los circuitos más demandados fueron los de granos y carnes.
Para este año, los empresarios piensan recoger el trabajo realizado este año a través de contactos y difusión, para lo cual tienen expectativas mucho más prometedoras para el 2003.
Para eso siguen trabajando en la puesta a punto de la página web donde hoy promocionan los servicios y difundiendo la actividad en ferias turísticas internacionales y a través de entidades como el Eurocentro de Rosario, mediante el cual piensan aceitar contactos con virtuales clientes de la Unión Europea.
Hasta el momento pasaron por los circuitos agroalimentarios visitantes de Colombia y Bolivia y hubo consultas de parte de contingentes de Nueva Zelanda y Australia. También piensan en apuntar a destinos como España e Italia.
S.C.
La Ciudad
