Sumar un punta. Goleador. Con experiencia. Es la otra premisa del DT de Newell's para alcanzar el gran desafío de pelear por ingresar a la Copa Libertadores. ¿Difícil, no? Claro, no hay muchas opciones a las que se puede aspirar teniendo en cuenta la situación económica del país para incorporar un delantero que llegue y juegue. Pero el Bambino Veira dice necesitarlo y por eso fue lo primero que pidió ni bien finalizó el Apertura 2002. Sin embargo, nunca tiró nombres. Sí características requeridas. Entonces empezaron a sonar nombres. Que este, que aquel, que el otro, de acá, del exterior. Pero el técnico rojinegro se mantuvo en silencio. Y después de cerca de tres horas de charla queda la sensación de que aún no lo tiene a mano para traerlo. De que no lo encontró, o al menos lo oculta muy bien esperando una respuesta.
"La premisa es traer un delantero para alternar con los jugadores que tenemos adelante", expresó el entrenador, como atenuando la categoría del refuerzo pedido, ni bien salió este gran tema de fin de año rojinegro.
-¿Un delantero para alternar o un refuerzo de jerarquía?
-La idea es traer un punta importante, pero no es fácil por la situación económica. De todos modos, el que llegue deberá pelear con los que están, porque siempre digo que el punta tiene que tratar de ganarse el puesto, porque ninguno marca un nivel sin fisuras, jugando los 19 partidos bien. Todos tienen altibajos y siempre hay que tener jugadores como opción para suplantarlos, con una enorme motivación para poder entrar en cualquier momento.
-¿El nombre ya lo tenés?
-No, dimos las características del que queremos. Que sea un tipo que llegue y resuelva. Y aunque es difícil encontrarlo, siempre alguno aparece.
-¿Y qué características tiene que reunir?
-Que arranque por izquierda, que tenga más de 100 partidos en primera, que haya hecho entre 60 y 70 goles, que cabecee bien y que sea confiable.
-No hay muchos con esas virtudes que puedan llegar.
-Sí, en verdad no hay muchos.
-¿Cuál debería ser el ideal?
-Y, por ejemplo, el Loco Abreu reúne todas las condiciones. Aunque está jugando en el exterior y por lo económico es casi imposible que pueda venir.
-Se rumoreó que habías hablado con el Pampa Biaggio.
-No, no hablamos con el Pampita.
El ping pong de preguntas y respuestas se interrumpió con un pedido de autógrafo al que el Bambino accedió gustoso. Pero tras el rito de la firma, el tema del goleador volvió a escena.
"Es que el de 9 es un puesto muy difícil de cubrir", aceptó Veira. Y la prueba está en que por el club pasaron en los últimos años Cobelli, Real, Gigena y no lograron asentarse. El último que apareció fue Nicolás Pavlovich, y a los 6 meses se fue.
En Newell's, hoy Veira tiene a Lisandro Sacripanti y pretende que repita, al menos en parte, lo hecho por Silvera, que para el Bambino es un ejemplo a seguir por su perseverancia, esfuerzo y sacrificio. El Loco es un nueve que se cansó de hacer goles en inferiores, pero que aún no encontró su puesta a punto en primera.
"A Sacripanti lo mata el estado de ansiedad. Por eso siempre le hablo para que se serene. Tengo una gran confianza en que va a explotar, por eso conmigo siempre jugó. Es un chico que se entrega al máximo al trabajo, que tiene sacrificio táctico, que nunca baja los brazos y que quiere aprender", confió el Bambino.
-¿Y Lagorio?
-Nunca pudo entrar en ritmo, siempre tuvo problemas de lesiones. Y hay otro chico, (Nicolás) Saucedo, al que hay que hablarlo, estar muy encima de él. Porque define bien, cabecea bien y le pega muy bien a la pelota. Pero debemos agregarle el sacrificio táctico, el espíritu y la solidaridad para que sea un jugador completo.
-Volviendo al refuerzo, ¿llegará el esperado nueve?
-Sí, además falta mucho.
-¿Tiene que conocer el fútbol argentino?
-Si es bueno rinde igual, no importa de dónde venga.
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La Ciudad
