Australia fue el cuco del equipo argentino por muchos años, hasta que en el Champions Trophy disputado en Amstelveen (Holanda) el seleccionado de Vigil empezó a revertir la historia (ganó 2 a 1 con goles de Mercedes Margalot y Cecilia Rognoni). Pero hay un partido que quedó grabado en la memoria de las chicas. Fue precisamente en la final de los Juegos Olímpicos de Sydney 2000, donde Las Leonas tuvieron que conformarse con la medalla de plata. Desde ese día convivieron con una espina clavada. Por eso había quienes esperaban ansiosas volver a enfrentarlas. Y el momento llegó en la semifinal del Mundial. "Yo prefería enfrentarme con Australia en la semifinal, lo había visto en la primera fase y no me parecía el mismo equipo de años anteriores. Sabía que había sufrido un recambio bastante importante y que tenía algunos puntos débiles que podían ser aprovechados. En cambio Holanda me parecía un equipo más sólido, mas fuerte", advirtió Ayelén Stepnik. Pero claro, si bien todas querían revancha, había quienes tenían más fresco el sabor amargo de aquella recordada final. Luciana era una de ellas. Por algo se atrevió a decir que "teniendo en cuenta los Juegos Olímpicos me hubiese gustado enfrentar a Australia en la final, les quería ganar en la final a toda costa. Igualmente creo que Holanda tuvo un Mundial muy bueno y la verdad que me sorprendió. Siempre me pareció un equipo muy frío, pero en esta oportunidad jugó realmente bien". "Ah, a mí también me hubiera gustado jugar la final con Australia, pero con las mismas jugadoras que nos ganaron en Sydney", retrucó Ayelén, quien sonriente agregó: "Sobre todo si jugaba Alyson Annan, ¿no Lucha?" Es que la excelente jugadora australiana tuvo durante muchos años un duelo aparte con Luciana. "Cada vez que nos enfrentábamos nos teníamos que marcar mutuamente y nos dábamos como locas. Nos cagábamos a palazos", confió Lucha.
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