La versión corrió ayer como reguero de pólvora en los Tribunales. Pero la presentación aún no se hizo efectiva. El vocal suplente de Rosario Central, Jorge Giannantonio, pediría la quiebra de la entidad de la que es dirigente con la intención de ejecutar un documento de 750.000 dólares que entregó Fiorentina de Italia por el pase de Ezequiel González y que fue endosado por la entidad de Arroyito. Al desaparecer la sociedad italiana, Central se transforma en el último responsable de este documento. Por la calle Mitre confían en que el titular del Open Pringles, que hace un año no concurre a las reuniones de comisión directiva, sólo utilice este rumor como un elemento de presión.
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