"Estamos en la vereda de enfrente", dice Gustavo Cordera con respecto a los políticos y los economistas, algunos de los cuales opinan que ya pasó lo peor de la crisis. "En Buenos Aires, en Ezeiza, están por instalar un basurero nuclear, con la aceptación de los diputados y los senadores -contó el cantante, indignado-. Acá la gente salió con las cacerolas cuando le sacaron la plata del banco, y no sale a gritar ahora, cuando le están quitando la vida. Con ese basurero va a haber muchos niños muertos, gente con mal formaciones. La crisis es una cuestión espiritual, por dinero están destrozando la vida de los argentinos", aseguró, y agregó: "Los políticos, con los millones de dólares que se llevan, se van a vivir afuera, y nos dejan acá muriéndonos como perros". Sin vueltas, Cordera se manifestó a favor del "que se vayan todos". "Lo pregono desde lo más profundo de mi corazón. Que venga una nueva dirigencia, joven, de gente notable y con espiritualidad, gente sensible, que no tenga nada que ver con la política. Con eso el país sale solo adelante. Los políticos no tienen nada en el alma, están vacíos, están hechos mierda, y lo único que quieren es plata y poder. No merecen ni siquiera que se les desee la muerte", disparó. El líder de Bersuit confía en que la mayoría vote por el "que se vayan todos". "No hay que darles el poder para que nos sigan cagando", aseveró. Por otro lado también afirmó que los partidos de izquierda "no tienen estructura para gobernar", y aclaró: "Yo no soy un líder revolucionario ni mucho menos, yo soy una persona que hace canciones". Germán Daffunchio, por su parte, comentó: "Más que se vayan todos, lo que me gustaría es que haya juicio para todos, que existiera la Justicia. El principio de todo es una justicia creíble. Hay que cortarla con esa red de mafia en el poder, aunque me parece que es una verdadera utopía", concluyó.
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