El Mundial de Fútbol está a la vuelta de la esquina. A partir del próximo viernes los fanáticos del deporte más popular de la Tierra estarán pendientes de la suerte que corran sus representativos nacionales, gritarán cada gol, masticarán bronca ante las jugadas desafortunadas y se abrazarán a sus hijos, amigos y hasta desconocidos para celebrar una victoria. La historia se repite cada cuatro años y los argentinos conocemos a la perfección el placer incomparable de los triunfos y la frustración casi irreparable que significa una despedida antes de los partidos finales. Durante esos días, los ojos del mundo posarán sus miradas en dos países que a pesar de su notable desarrollo tecnológico no perdieron sus raíces milenarias. Se trata de Japón y Corea, los lujosos anfitriones de la primera Copa Mundial de Fútbol de este siglo, que se disputará desde el 31 del corriente hasta el 30 de junio. Japón -uno de los países más desarrollados de la tierra, líder en la producción de tecnología electrónica- servirá de sede a la disputa del partido final del torneo ecuménico. Para conocer más sobre este país asiático La Capital consultó a cuatro destacados de nuestra ciudad que se animaron a compartir sus vivencias en esa tierra tan lejana para nosotros. El diario de viaje de Ada Lamboy, profesora de yoga científico; José Luis Imhoff, médico cardiólogo y ex entrenador de Los Pumas; Pedro Mario García, violinista, solista en la Orquesta Sinfónica Provincial y en la Orquesta de Cámara de Rosario y director del Quinteto de Cuerdas de la Municipalidad de Rosario; y Marcelo Trivisonno, ex jugador de fútbol de la liga japonesa, guarda anécdotas, sorpresas, nostalgia y emociones de una experiencia única, fascinante, difícil de olvidar. Cuatro perfiles que pintan un destino sorprendente. (Producción periodística: María del Carmen Hernández, Belén Travesaro y Lucas Vitantonio)
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