Oscar Lehrer
Son muchos los problemas, principalmente de orden económico, por los que están atravesando varios de los clubes que participan en los máximos niveles de la Liga Nacional de básquetbol.
Eduardo Bazzi, presidente de la Asociación de Clubes (AdC), aceptó estar preocupado por la situación por la que están atravesando varias instituciones en diálogo con Ovación: "Si dijera que no estoy preocupado con la situación que vive el básquetbol en particular y el país en general, estaría mintiendo. El haber dividido en dos Conferencias (Norte y Sur) la edición que actualmente se está disputando arrojó un interés adicional con cuatro equipos (Libertad, Atenas, Estudiantes de Olavarría y Gimnasia de La Plata) clasificados para la primera edición del Top 4 que se va a jugar en Santa Fe entre el 9 y el 11 de enero, y que por el hecho de tener un incentivo económico (se repartirán 135 mil dólares), fortificó esta primera etapa. También tuvimos un aumento de recaudación estimativa en un dos por ciento, con un precio en las entradas menor que en las ediciones anteriores. Si bien, este dos por ciento puede considerarse exiguo, para nosotros es importante, porque teniendo en cuenta el presente económico que vivimos hoy, es positivo. No creo que haya en la República Argentina ninguna empresa que en los últimos seis meses haya tenido un aumento de un dos por ciento. El índice económico evidencia disminuciones que oscilan entre un 40 y un 50 por ciento.
-¿Pero a pesar de ese mínimo porcentaje de aumento los problemas en varios clubes han aumentado?
-Desde el punto de vista económico tenemos algunas instituciones, no son todas, que tienen problemas muy importantes, pero también hay que saber diferenciar cuál es el tipo de instituciones que tienen problemas. Por ejemplo en los casos de Obras Sanitarias y Ferro Carril Oeste, la problemática que tienen es de carácter institucional, y no por la actividad del básquetbol específicamente. Por el contrario, en Ferro, en conducciones pasadas, el básquetbol supo aportar dinero para el mantenimiento del fútbol. Además, últimamente gran parte de lo que ingresó en ese club por la venta de Kammerichs (Federico) se utilizó para poder pagar la luz y una serie de servicios que adeudaba la entidad de Caballito. Vale decir que el básquetbol está sirviendo en algunos casos de frontón a problemas que son de tipo institucional.
-¿Obras entró en convocatoria?
-Obras Sanitarias entró en convocatoria, pero creo que el básquetbol está al margen de eso. Evidentemente, Obras arrastra problemas de funcionamiento de larga data. No podemos dejar de negar que hay otros clubes que si tienen problemas de funcionamiento presupuestario. De esas instituciones algunas tienen características geográficas que no las favorecen. Pensar que en General Pico existen dos instituciones que juegan en el nivel A, es algo que no termina de entenderse. Otras ciudades, como La Rioja y Comodoro Rivadavia, por ejemplo, tienen una posición geográfica que demandan un costo operativo, principalmente en el área viajes, que hoy es muy difícil soportar dentro de una competencia de carácter nacional como es nuestra liga. En síntesis, contamos con instituciones que en primer lugar tienen problemas de tipo orgánico general y otras donde evidentemente los lugares donde se encuentran asentadas no son los más propicios en estos momentos para continuar participando por lo menos en la Liga Nacional A.
-Al margen de la situación de Ferro Carril Oeste y la de Obras Sanitarias, preocupan en la Asociación de Clubes los problemas de Andino, Gimnasia de Comodoro y Estudiantes de Olavarría, por nombrar a algunos clubes.
-Hay instituciones que no hacen una lectura correcta del presupuesto y no toman decisiones valientes al comienzo de la competencia. Eso hace que siempre sean las mismas la que llegan a esta situación. Si a esta altura tienen tantos problemas dudo que muchos de ellos puedan terminar la Liga. Uno preferiría tener clubes saneados. Pero debemos ser realistas. Estamos transitando por un problema económico que es el peor que ha vivido la Argentina en toda su historia. Por los problemas enumerados han desaparecido muchos sponsors. El problema de la Liga Nacional es con aquellas instituciones que vienen con deudas desde hace muchos años y que tienen prácticamente comprometidos los derechos televisivos de la temporada en vigencia. Hay que tener en cuenta que un club que comience a participar hoy con un déficit cero en la Liga Nacional, indudablemente que con un ingreso que le cubra entre el cincuenta y el sesenta por ciento del presupuesto, haciendo un trabajo medido y ordenando, tendría que andar medianamente bien. Pero indudablemente, en la Liga Nacional, se va a producir la decantación indudablemente porque venimos trabajando desde hace unos años con los plazos del libre deuda y habrá una renovación que hará al mejoramiento de la competencia.
-Para que se produzca un mejoramientos ¿será necesario que algunos clubes dejen de participar?
-El sistema no sería dejar de participar. Creo que tiene que haber un sinceramiento. La Liga es para el que puede y no para el que quiere, dijo en alguna oportunidad uno que sabía mucho de esto (aludiendo a León Najnudel), pero sus dirigentes serán los que deberán tener en cuenta en que categoría tendrán que participar. Lo que varios deberían hacer es imitar a aquellas instituciones que por diversos motivos tuvieron que dejar de intervenir, y ahora siguen haciendo básquetbol, en las categorías menores, donde económicamente pueden. No es obligación participar y tener que hacerlo en el nivel A. Hay clubes que tendrían que haber meditado antes de comenzar un torneo y analizar cuales eran sus posibilidades de participación. Algunos quieren crear una Liga de diferentes características, una competencia cerrada y sin descensos. Nosotros, en cambio, garantizamos una Liga abierta y participativa con ascensos y descensos.
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La Ciudad
