Año CXXXIV
 Nº 49.291
Rosario,
lunes  05 de
noviembre de 2001
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TC 2000: Ponce de León, campeón con lo justo
Reguló y se llevó el título

Llevando a cabo el meticuloso y correcto trabajo de siempre, y aprovechando el abandono de su único rival en la pelea por el título, Walter Hernández, el juninense Gabriel Ponce de León consiguió ayer en el autódromo Oscar Cabalén de la ciudad cordobesa de Alta Gracia, lo que todos ya daban por hecho: consagrarse, a una fecha del final de la temporada, como campeón del TC 2000.
En lo que respecta a la pelea por el título, la carrera llevada a cabo ayer en el Cabalén salió tal cual se preveía. Walter Hernández salió a matar o morir desde el vamos, mientras que Ponce de León arrancó con la calculadora bajo el brazo.
Y a partir de ese planteo, el gasto lo hizo Hernández, que fue y arriesgó, como cuando tuvo que superar al chaqueño Juan Manuel Silva, el brasileño Carlos Bueno o Fabián Flaqué, para tratar de arrimar lo más adelante posible.
Pero bueno, para Hernández no todo dependía de él mismo. Y entonces habrá que decir que, a pesar de todos los problemas que encontró Ponce de León para encontrar un auto más o menos competitivo, el juninense tuvo el medio mecánico justo para lograr la ubicación que le permitiese quedarse con el campeonato.
Entonces navegando entre el octavo y el sexto puesto durante gran parte de la carrera, Ponce de León tuvo siempre la tranquilidad de que el título se iba para Junín.
Esa tranquilidad, como si fuera poco, se agigantó en la vuelta 28, con sólo 5 para llegar a la bandera a cuadros, cuando a raíz de una falla mecánica, Hernández se quedó a un costado del camino, ofreciéndole en bandeja el título al rival de toda la temporada.
"Dejé todo, es una lástima", señaló un resignado Hernández al final.
La atención, como era lógico, estuvo centrada en la definición del campeonato y quizá eso le restó un poco de espacio a la contundente victoria, de punta a punta, lograda por el arrecifeño Norberto Fontana.
Bajo el calor cordobés los Toyota Corolla de Fontana y Juan María Traverso aparecieron en su esplendor. El arrecifeño tuvo resto para sacarle más de 28 segundos a su escolta, mientras que al Flaco le sobró máquina para quedarse con el tercer escalón del podio.
Ponce de León se convirtió ayer en el campeón más joven en la historia del TC 2000. Al comienzo de la temporada salió de punto, quién duda de que el gran candidato al campeonato era Hernández, pero terminó siendo banca, con manejo, trabajo y auto. (DyN)


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