"Estoy entre los mejores cinco jugadores del país", expresó casi entre dientes el rosarino. Más allá de que González no puede con su humildad, es lo que realmente siente. Pero si bien se le hace difícil situarse por encima de otros grandes como Roberto De Vicenzo, Angel Cabrera o Eduardo Romero, no le tiembla el pulso a la hora de catalogarse como uno de los referentes del golf argentino. -¿Te considerás uno de los mejores golfistas de Argentina? -Creo que debo estar en el cuarto o quinto lugar. Más allá de que no esté en actividad creo que hay que ponerlo primero a Roberto De Vicenzo, ya que fue y será lo más grande del golf argentino. Después están Vicente Fernández, que tiene la capacidad de enseñar a otros jugadores todo lo que sabe, algo que no es nada fácil; Eduardo Romero, mi ídolo de siempre y por eso no puedo estar adelante de él, y por supuesto Angel Cabrera y José Cóceres, que son jugadores que alcanzaron un muy buen nivel. Yo estoy trabajando, pero el hecho de estar entre los mejores cinco del país es un gran mérito. -¿Esto lo decís convencido o es producto de tu humildad? -Por las dos cosas. Soy humilde pero a la vez realista. El ejemplo más claro es la nominación de Cabrera y Romero para jugar la Copa del Mundo. Creo que si los eligieron a ellos por algo será. No me gusta pasar por encima de ellos. -¿Leíste las declaraciones que hizo De Vicenzo cuando ganaste en Suiza? -Sí. -¿Qué sentiste? -Fue un placer enorme. Cuando alguien te halaga, y más con la categoría de De Vicenzo es algo muy lindo porque te está felicitando alguien que ganó cientos de torneos. -Entre otras cosas dijo que estaba bien que hayas ganado, que te merecías un triunfo así, ¿por qué creés que lo dijo? -Por diferentes razones. Creo que De Vicenzo se sintió orgulloso porque el que ganó el torneo fue un argentino y él sabe mejor que nadie lo que se siente.
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