El ministro del Interior, Ramón Mestre, fue el único miembro del gobierno que aceptó ponerle un porcentaje a la adhesión de la gente al paro, que para él fue de "alrededor del 20 por ciento". Mestre sobrevoló en helicóptero la zona metropolitana y luego contó lo que dijo haber visto. "El movimiento comercial se veía absolutamente normal", dijo. Luego subrayó "el perjuicio" que genera el paro en un momento "extremadamente difícil, donde mantener los puestos de trabajo es sin duda el objetivo fundamental, con salarios que todos reconocemos que son bajos".
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