El presidente Fernando de la Rúa salió a relativizar ayer personalmente los alcances de la huelga nacional dispuesta por la CGT disidente de Hugo Moyano, y fustigó a sus organizadores por tener "el vicio" de hacer paros. "Estos paros se apoyan siempre en la restricción al transporte, pero la gran mayoría (de la gente) tiene la voluntad y decisión de trabajar", afirmó el jefe de Estado. También la ministro de Trabajo, Patricia Bullrich, y otros funcionarios criticaron la medida desde el gobierno. Poco antes de someterse a una angioplastia, De la Rúa relativizó el paro al asegurar que las imágenes que transmite la televisión no coinciden con la realidad. "Esas imágenes dan una visión exagerada de lo que sucede, la adhesión al paro es absolutamente relativa", afirmó el presidente. Si bien no precisó cifras de acatamiento, dijo que fueron "bajas". El presidente dijo que el gobierno intenta reactivar la economía nacional y aseguró que en ese marco los paros son "absurdos". Además, pidió "terminar con este vicio de los paros porque sí, por ejercicio político, porque causan perjuicios que después los pagamos todos los argentinos". También dedicó unos párrafos al paro en un mensaje que difundió por la cadena oficial. "Este vicio de un sector del sindicalismo sólo sirve para generar problemas a todos los argentinos y las pérdidas que estos para originan las pagamos todos a partir del lunes", explicó. Acto seguido, se preguntó: "¿Cuál es el sentido de instrumentar un mecanismo de permanentes huelgas cuando el gobierno está gestando un acuerdo de unidad nacional para que entre todos los sectores resolvamos los problemas que detienen la marcha?". En tanto, la ministra Bullrich sostuvo que "no puede plantearse el paro" nacional "en términos de éxito o fracaso sino como absurdo", y desestimó especular con porcentajes de adhesión con el siguiente argumento: "La gente va a trabajar como puede", refiriéndose así a la falta de transporte. "¿Qué hay detrás de Moyano, que impide trabajar cuando la gente quiere ir a sus lugares de trabajo? Lo que hay es una intención de impedir que las cosas salgan", acusó Bullrich. La titular de la cartera laboral también ratificó que denunciará ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT) a las dirigencias de la CGT disidente y la CTA, organizadoras del paro, por "violación total a la democracia sindical". Previamente, en las primeras horas de la mañana, había exhortado personalmente a la gente a que hiciera un esfuerzo para ir a trabajar. Bullrich dijo que los dirigentes sindicales cometen "un abuso total del derecho de huelga" ya que el paro de ayer se decidió, según su opinión, "sin consultar en asamblea a los trabajadores". Además, disparó: "Acá hay cuatro dirigentes que dicen «vamos al paro» y los demás acatan, porque no tienen manera de no hacerlo por los mecanismos verticalistas que existen en los sindicatos".
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