Fue una imagen difícil de compaginar la que dejó Juan Antonio Pizzi en la cancha de Lanús. Jugó algo estático y quedó absorbido por los centrales locales, que no lo dejaron recibir una sola pelota redonda en todo el partido. Sumado a esto, los centros aéreos que buscaron su cabeza siempre cayeron en las cabezas contrarias. Sólo por el respeto que inspira, su trayectoria y sus más de cincuenta goles en Central, permaneció en la cancha hasta más allá de la media hora del segundo tiempo, cuando fue reemplazado por Daniel Quinteros. Esta faltante de ritmo de partidos es reconocida explícitamente por el goleador que a pesar de su baja performance en la tarde de ayer, confió que "estoy en una readaptación progresiva y esto sólo se logra jugando partidos; hoy terminé mejor físicamente que en el partido del miércoles". Como atenuante queda decir que cuando el calor agobia, las diferencias entre aquellos hombres que están óptimos, en lo físico, y aquellos que no lo están, se hacen más evidentes. -Estás en una etapa de retomar el ritmo de partidos, ¿es una complicación adicional, en tu caso, jugar con más de treinta grados? -Por la época del año que estamos, por las altas temperaturas, a todos los futbolistas nos cuesta jugar más de lo normal. En cuanto al partido, se definió por jugadas determinantes, algo similar a lo ocurrido la semana pasada (Central-Huracán), que condicionaron el resultado. -¿Pensás que el árbitro fue parte de esas jugadas determinantes? -En la jugada del penal (el 1 a 0 de Klimowicz) considero que fue demasiado riguroso y después nos anuló un gol; desconozco los motivos porque nadie pidió que se formara la barrera. Todo esto condiciona el resultado final. -En cuanto a tu trabajo, se te observó muy tomado por los centrales de Lanús. ¿Porqué se te complicó hacerte del balón e intervenir en el juego? -Sé que estos partidos me van a costar mucho, y es por la inactividad que traigo de Portugal. Pero la única manera de corregir esto es jugando. Hoy me sentí mejor que el miércoles pasado y supongo que la progresión será ascendente a medida que pasen los partidos.
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