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 domingo, 19 de agosto de 2007  
Acusado de asesinar a remisero ya está en una cárcel rosarina

El Chino Espinoza, acusado de matar a balazos a un remisero en zona oeste hace diez meses, fue trasladado a Rosario desde la alcaidía de la ciudad de Resistencia, donde purgaba una condena por robo.

   Según fuentes policiales, el delincuente fue conducido a la cárcel de Piñero de donde había salido un mes antes de asesinar de dos balazos a Héctor Avila, un ex policía de 52 años que trabajaba de remisero.

   Javier Aníbal Espinoza, conocido como Chino, llegó entrada la noche del viernes a la Jefatura de Rosario escoltado por dos vigilantes de la Brigada de Homicidios. El muchacho estaba detenido en la alcaidía de Resistencia desde el 14 de diciembre pasado cumpliendo una condena a 4 años y 6 meses de prisión robo simple. Ahora para él será como empezar de cero. Como estuvo prófugo desde el día del asesinato de Avila, y fue identificado por varios testigos como el autor del crimen, deberá dar su versión de lo sucedido al juez de Instrucción Alfredo Ivaldi Artacho.



El crimen. El 6 de octubre de 2006 Héctor Avila, un cabo primero retirado de la policía que trabajaba para una remisería de Pérez, dejó a dos pasajeras en barrio Las Palmeras a las 10 de la mañana. Unos segundos después fue interceptado por dos jóvenes que intentaron asaltarlo en Benítez al 2200, una calle que es colectora de Circunvalación, sobre un tramo entre Cerrito y 27 de Febrero. El robo fue evidente: ambos ladrones irrumpieron en el auto y forcejearon con el chofer, que consiguió bajar del vehículo e intentó perseguir a los asaltantes. Entonces uno de ellos se dio vuelta y abrió fuego. Avila recibió un balazo en la pierna y otro en la espalda. La arremetida de los asaltantes, a plena luz del día, fue vista por numerosos testigos.

   Varios de ellos contaron que los matadores vivían en la misma cuadra del incidente. Uno de ellos, era Javier Aníbal Espinoza, quien había salido un mes antes de Piñero.

   La casa de los padres del Chino fue allanada nueve veces por efectivos de la subcomisaría 22ª, siempre con resultado negativo.



La revelación. Pero en julio, la policía de Chaco envió un oficio a la sub 22ª para que notificaron a los padres de Víctor Alejandro Cabrera que su hijo estaba detenido en Resistencia. El oficio fue revelador ya que el domicilio y los nombres citados eran los mismos que los de Espinoza.

   Es que el Chino ya había usado ese nombre falso en otras detenciones. Entonces desde la subcomisaría rosarina enviaron a sus pares chaqueños una foto de Espinoza para que la cotejaran con el rostro de Cabrera. Y ahí se terminaron las dudas.
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