Los finalistas del ballottage francés se midieron en un caliente debate

Royal adoptó una táctica ofensiva pero perdió la calma. Sarkozy eligió un tono más moderado

París. - Los dos candidatos finalistas que se disputarán el domingo la presidencia francesa, el conservador Nicolas Sarkozy y la socialista Segolene Royal, se enfrentaron anoche en un caliente debate televisivo, considerado como la última oportunidad de los postulantes para conquistar los votos clave del electorado de centro. Royal adoptó una táctica ofensiva para enfrentar el debate de dos horas y media, y por momentos perdió la calma, mientras que Sarkozy, que marcha primero en las encuestas, eligió no arriesgarse y moderar sus instintos agresivos.

La socialista acusó al ex ministro del Interior de falta de credibilidad, mientras que Sarkozy consideró que a su rival le faltó precisión en sus declaraciones. "Si usted habla de todo al mismo tiempo no podremos profundizar en nada", criticó Sarkozy. Royal le pidió en varias ocasiones al conservador que la dejara hablar. "Esto no es serio", le reprochó.


Grandes desacuerdos
De entrada Royal responsabilizó a Sarkozy por el balance negativo del gobierno conservador en la lucha contra la violencia a pesar de su publicitada política de tolerancia cero Sarkozy por su parte aseguró que tuvo éxito ya que la criminalidad se redujo en un 10% en los últimos cinco años

El primer gran desacuerdo fue sobre la semana laboral de 35 horas, que los socialistas consideran un hito en la legislación social, mientras los empresarios la califican de freno para los negocios. Sarkozy quiere compensarla mediante una exención de impuestos sobre las horas extra para que la gente trabaje más. También dijo que la semana acortada fue un "error monumental", y observó que ningún otro país europeo la ha adoptado.

El tono se elevó en los últimos tramos del debate, cuando se tocó el tema de la educación. Sarkozy aseguró que "los niños con discapacidad tienen que ir a los colegios con los otros niños", y agregó que los padres podrán acudir a los tribunales si no se cumplen estas medidas. Royal se mostró encolerizada: "Usted cayó en la inmoralidad política usando a los niños disminuidos", respondió, y recordó que fue ella, como ministra de Cultura, quien propuso un plan para integrar a los niños discapacitados en los colegios, que luego "fue desmantelado" por el gobierno conservador.

"Usted perdió la calma, se sale de sus casillas con mucha facilidad", replicó Sarkozy, convencido de su capacidad para descolocar a su oponente. "Para ser presidenta de la República hay que mantener la calma", insistió.

Sarkozy lideró la primera vuelta electoral con el 31,2% de las preferencias, mientras Royal llegó segunda con el 25,9%. Dos encuestas difundidas ayer, antes del debate, volvieron a mostrar al conservador como favorito frente a la socialista, una por 52% contra 48 y otra por 53,5 contra 46,5. El primer sondeo fue elaborado por la consultora BVA y el segundo por Ipsos/Dell.


Lucha por el centro
La campaña por el ballottage se concentró en capturar los casi siete millones de votos que recibió el centrista François Bayrou quien en la primera ronda salió tercero Bayrou por su parte no dio su apoyo a ningún candidato El martes el líder de extrema derecha Jean Marie Le Pen hizo lo mismo y le pidió a las 3,8 millones de personas que votaron por él que no apoyen ni a Royal ni a Sarkozy l

La socialista Segolene Royal y el conservador Nicolas Sarkozy se enfrentaron por primera vez en un debate por TV.