Médicos municipales en pie de guerra

Paran hoy y tres días la semana que viene. Se mantienen las guardias mínimas. Piden un salario que los acerque a la canasta básica y mejores condiciones de trabajo

Los trabajadores autoconvocados de la salud municipal anunciaron un paro de 72 horas que se llevará adelante a partir del próximo martes a las 10. Además, hoy continuarán con el segundo día de huelga programado para esta semana y, a las 9, se reunirán frente al Hospital Alberdi, donde quedó sin trabajo un enfermero eventual. En la reunión pública que el grupo realizó ayer frente al Centro de Especialidades Médicas Ambulatorias de Rosario (Cemar), los licenciados en enfermería también hicieron oír su voz. "No nos consideran como profesionales, a pesar de que estudiamos cinco años", enfatizaron.

Ayer, y al tiempo que se conocía el aumento del 20 por ciento para los municipales, los trabajadores autoconvocados de la salud local debatieron sobre los alcances del incremento. "Es insuficiente", explicaron y dejaron sentado que sus reclamos van más allá del salario, y que quienes firmaron el acuerdo con el Ejecutivo no los representan.

Para los trabajadores de la salud, el paro que llevan adelante esta semana tiene una adhesión "importante", con apoyos parciales o totales, tal como ocurrió en el Carrasco. En este lugar, y según señaló Liliana Díaz -integrante del grupo de trabajadores autoconvocados de la salud-, desde hace tiempo no se aplica el canon conocido como infecto contagioso, que además de un plus económico computa doble aporte al sistema jubilatorio.

El detalle no es menor si se tiene en cuenta que en ese hospital, y tal cual lo denunciaron los trabajadores, "ya hubo casos de empleados que se contagiaron enfermedades infecciosas que los llevaron a la muerte. Nosotros también tenemos nuestros muertos, que no siempre son por represión, también por condiciones de trabajo", explicó Díaz, quien lleva dos décadas como médica en el Carrasco. Además, dijo que el reclamo también apunta a la puesta en marcha de la carrera sanitarista, que a pesar de estar creada y aprobada desde 1991, aún duerme en un cajón.

El grupo de autoconvocados incluye todos los roles, profesionales o no, de los distintos efectores municipales: médicos, bioquímicos, enfermeros, psicólogos, maestranza y administrativos, entre otros. "Queremos ser respetados y que nos llamen a dialogar, porque no hablamos sólo de salario, sino de condiciones de trabajo, de estrés, y de los compañeros eventuales", citó Mario Chavero, otro de sus integrantes. A modo de ejemplo, denunciaron que la Maternidad Martín habría negado licencia por embarazo a algunas trabajadoras y que en el área de Salud Mental se contrató un psicólogo para atender inundados, cuando sobraban agentes voluntarios para hacerlo.