Balearon a un distribuidor de tortas

Casi al mismo tiempo en que Carlos Martín Pérez era asesinado en Pasco al 4000, en el sureste de la ciudad otro repartidor era baleado a mansalva en un intento de robo. Félix López, de 28 años, recibió un disparo en el pecho cuando un ladrón lo emboscó en Grandoli y Presidente Quintana. El hombre quedó internado en el Heca y anoche estaba fuera de peligro.

Una fuente policial contó que todo sucedió cerca de las 18 de ayer. A esa hora, López llegó en una Volkswagen Caddy al cruce de Abanderado Grandoli y Presidente Quintana para dejar un pedido en una casa situada cerca de esa esquina. El muchacho, casado y padre de tres hijos, trabaja en La Tortería, un negocio de venta de postres situado en Pellegrini al 3000. "Ni siquiera tuvo tiempo de descender del vehículo, enseguida fue abordado por un muchacho que le disparó a mansalva", comentó Diego, responsable del local.

"Dame la plata", habría sido la orden del delincuente hacia el repartidor mientras lo encañonaba con un revólver. Mientras esto ocurría, López sostenía con uno de su dedos el pulsor de su handy conectado al negocio para el que trabaja ante el temor de ser asaltado en una zona considerada roja por la policía.


Por handy
Apenas escuchó la intimidación el trabajador no vaciló Aceleró el auto con la intención de alejarse y la respuesta del maleante no se hizo esperar gatilló el revólver y un balazo atravesó el pecho de López debajo del brazo izquierdo Yo escuché el tiro por el handy y me desesperé contó Diego a La Capital quien enseguida llamó a la policía para narrar lo ocurrido

En tanto, el asaltante escapó en dirección a la villa ubicada en la zona de Spiro y Tafí sin llevarse nada mientras el repartidor, malherido, pudo conducir el vehículo unos 150 metros y llegar al destacamento policial 24, de Grandoli y Ricardo Güiraldes.

"Ayúdenme, me acaban de robar", rogó el trabajador a los policías. Un rato después, un móvil del Comando Radioeléctrico lo trasladó al Hospital de Emergencias, donde anoche estaba internado, aunque su vida, según dijeron el vocero consultado y el propio responsable del negocio, no corría peligro.