Año CXXXVII Nº 49331
La Ciudad
Política
Economía
Información Gral
Opinión
El Mundo
La Región
Policiales
Cartas de lectores



suplementos
Ovación
Escenario


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 17/12
Mujer 17/12
Economía 17/12
Señales 17/12
Educación 16/12
Estilo 16/12
Salud 13/12
Autos 30/11
Página Solidaria 29/11
Chicos pero grandes 11/11

contacto

servicios
Institucional


 viernes, 22 de diciembre de 2006  
Sucesión o continuismo. La prolongada enfermedad del octogenario líder comunista alimenta rumores
Raúl Castro huye de la imitación y define un nuevo estilo de gobierno
El gobernante interino de Cuba dijo que Fidel "es insustituible" y se mostró abierto a las discrepancias

La Habana. - Cinco meses después de asumir provisionalmente el poder en Cuba, Raúl Castro dejó claro que no pretende imitar a su hermano Fidel y definió las líneas de un nuevo estilo de gobierno basado, dijo, en el debate y las decisiones colegiadas. Ante cerca de un millar de jóvenes reunidos en la clausura del Congreso de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU), la noche del miércoles, el ministro de Defensa sorprendió con un discurso improvisado en el que relató anécdotas infantiles de los hermanos Castro mezcladas con mensajes políticos contundentes. Fidel Castro, afirmó, "es insustituible, salvo que los sustituyamos entre todos juntos, cada uno en su lugar" y "el sustituto sólo puede ser el Partido Comunista de Cuba, hoy, mañana y siempre".

El general, de 75 años, aclaró que no pretende copiar a su hermano Fidel, que le entregó temporalmente el poder en julio aquejado de una enfermedad no revelada. "Cuando uno trata de imitar, pues entonces fracasa", dijo al clausurar el congreso de la federación estudiantil cubana. Partiendo de esta máxima, dibujó las líneas de su modelo de gestión, que contrasta con la fórmula de toma unipersonal de decisiones y los largos discursos de Fidel, quien, según algunos de sus biógrafos, llegó a batir un récord de nueve horas ininterrumpidas.

Raúl, un hombre reacio al protagonismo mediático que estuvo siempre a la sombra de su hermano Fidel, dijo que gobierna con el mismo estilo colectivo que ha utilizado con sus generales durante casi medio siglo al frente de las fuerzas armadas. "A veces hay quien le teme al término discrepar, pero yo soy de los que digo que mientras más se discuta, mientras más se discrepe (...) de esas discrepancias siempre saldrán las mejores decisiones", añadió.

Percibido a menudo como un hombre poco carismático, Raúl Castro habló improvisadamente el miércoles durante más de media hora, contó anécdotas de su infancia junto a Fidel y arrancó carcajadas con sus bromas a alrededor de 800 estudiantes universitarios.


Potencial reformista
Raúl es el menos conocido de los hermanos Castro. Fuera de Cuba es percibido por algunos como un potencial reformista y dentro por otros como un militar de mano dura. Desde que reemplazó en julio a Fidel, fortaleció el papel del gobernante Partido Comunista e incorporó a dirigentes más jóvenes a su cúpula. Fidel Castro, que lideró la revolución de 1959 y gobernó Cuba ininterrumpidamente durante los siguientes 47 años, no ha sido visto en público desde hace más de cuatro meses y medio, atizando los rumores sobre un empeoramiento de su salud.

Las palabras del hombre a cargo del gobierno cubano se conocieron pocos días después de que medios de todo el mundo publicaron diversas versiones según las cuales el líder caribeño sufre una enfermedad terminal que lo llevará a la muerte en no más de tres meses. Esas versiones -como otras que auguraban que Fidel no llegaría vivo a la Navidad- fueron desconocidas por el régimen cubano, a pesar de que Fidel no pudo presentarse hasta ahora en público para contrarrestar lo que se dice sobre él.


La fobia estadounidense
El diario Granma, órgano oficial del gobierno cubano, salió al cruce de esas versiones, originadas principalmente en fuentes de la inteligencia estadounidenses, pero en vez de desmentirlas criticó duramente a sus emisores. "En los más altos círculos de poder de EEUU, la fobia y el ánimo destructor hacia la revolución cubana, y de modo particular hacia Fidel, constituyen una patología al parecer incurable", señaló Granma.

El diario agregó que "al récord criminal de más de 600 intentos de asesinato, organizados por los servicios de inteligencia norteamericanos, se suma la morbosa obsesión de implorar por la pronta desaparición" de Castro, "como si esa apuesta garantizara el tan ansiado plan de anexión de la isla".

Bajo el título "Desconcertados y morbosos", el diario repasó recientes declaraciones del jefe de la diplomacia norteamericana para las Américas, Thomas Shannon, quien afirmó que "con Fidel Castro vivo, el régimen se ha vuelto más ortodoxo" y que "sólo nos queda esperar y ver lo que ocurre".
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto
Fidel y Raúl Castro durante una sesión del Parlamento cubano en 2006.

Notas Relacionadas
Una ausencia que ya se transformó en costumbre



  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados