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 sábado, 04 de noviembre de 2006  
"No somos responsables y no podemos parar la planta"

Capitán Bermúdez.- Directivos de la compañía Petroquímica Bermúdez salieron al cruce de las imputaciones realizadas por funcionarios de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable de la provincia, quienes los sindicaron como responsables de escapes de cloro. En ese sentido, explicaron las causas por las cuales continuaron con sus actividades cuando pesaba sobre ellos una intimación de cese de actividades impartida por la cartera medioambiental.

Los empresarios reconocieron que el 11 de octubre último se produjo una liberación de gas como consecuencia de un corte de energía que detuvo el compresor de aspiración de la planta. Sin embargo aclararon que el escape tuvo una duración de tres segundos, tiempo necesario para que se accione una válvula de seguridad que funciona normalmente. "Por esa razón, la cantidad de cloro emanado fue insignificante", indicaron, y añadieron que "esta planta siempre trabajó así y a partir de ese episodio se están proyectando mejoras para evitar situaciones similares y recuperar esos pequeños escapes".

Los responsables de la empresa desmintieron que se haya producido un escape el 1º de noviembre y esa aseveración fue ratificada por el secretario adjunto del Sindicato de Químicos y Petroquímicos, Juan Carlos Giachello. "Eso es falso, y estamos todos los trabajadores que podemos avalar que no hubo ninguna contingencia de esa naturaleza", explicó.

En ese sentido, el gerente de la planta, Eduardo Dudziak, aseguró que no hubo observaciones de escapes e indicó que "el cloro en forma de gas tiene un peso específico mayor al del aire y tiende a descender inmediatamente. Es por eso que creemos imposible que, en caso de que hubiera ocurrido una circunstancia de esas características, pudiera afectar a los niños de la escuela que denunciaron inconvenientes, que se encuentran a unos 1.500 metros de la fábrica y con la planta de Celulosa de por medio. No decimos que no sufrieron lo que relatan, sólo que pudo deberse a otro tipo de emanación que no tuvo origen en esta empresa", manifestaron.

Respecto a la inspección realizada por Medio Ambiente y la Secretaría de Trabajo, el responsable de ventas de la empresa, Enrique Tinelli, dijo que "los funcionarios recorrieron las instalaciones y a las 14 elaboraron un acta en la que volcaron los dichos de la gente. Nosotros explicamos que estábamos trabajando sin ninguna anomalía. Tres horas después nos llegó la intimación para el cese de actividades por lo cual todo nos resulta muy extraño".

"Por otra parte -continuaron- resulta imposible detener la actividad de la planta. Técnicamente no se puede parar el proceso de un momento a otro, si lo hacemos sí estaríamos generando un peligro potencial para la población".


Intimación
Explicaron que cuando se produjo el escape del 11 de octubre funcionarios de Medio Ambiente los emplazaron para que presenten en 30 días proyectos de obra y planes de contingencia a fin de desactivar los sistemas de emisión de cloro.

"De modo que estamos dentro de ese plazo y parte de él lo dedicamos a recorrer plantas similares a la nuestra ubicadas en otros puntos del país para interiorizarnos acerca de sistemas de recuperación de eventuales emanaciones. Por otra parte, no arrojamos efluentes al río. Utilizamos gran cantidad de agua, pero solamente para los sistemas de refrigeración que no tienen contactos con químicos", aseguraron.

"Por esa razón estamos sorprendidos por la intimación para que detengamos las actividades cuando aún está vigente el plazo estipulado y no hubo circunstancias como las que denuncian. Además nos golpea la intensa campaña de los medios fundada en datos erróneos".

Por su parte, el asesor de la compañía, Juan Nogueira, remarcó que la empresa hizo esfuerzos superiores a lo dispuesto por la normativa para evitar impacto ambiental negativo. "Esta empresa es preexistente a la sanción de la legislación que exige el estudio de impacto ambiental, pero nosotros avanzamos con las presentaciones ante la repartición. Además, en diez años de funcionamiento no hubo ningún inconveniente y no veo la razón por la cual surgirían ahora, si no se modificaron los métodos de trabajo", enfatizó.

Los empresarios coincidieron al señalar que pretenden mantener una reunión con Terenzio con el fin de aunar criterios de trabajo y arribar a conclusiones y lineamientos de trabajo que no perjudiquen a la población, a los trabajadores ni al medio ambiente.
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