Noche de ronda

Mariachis, frijoles y tequila, una trilogía que no debe faltar

De noche, las cantinas constituyen toda una institución nacional donde al calor de las copas y la música se consolidan grandes amistades. La Plaza Garibaldi es uno de los sitios más conocidos donde se puede cenar, tomar una copa y oír música de mariachis. El bar La Opera es uno de los más tradicionales así como El hijo del Cuervo. Ambos muy recomendables.

La gastronomía mejicana cuenta con una gran tradición que viene de la antigüedad. Basta con leer el libro de Laura Esquivel "Como agua para chocolate" para comprender la famosa trilogía mesoamericana caracterizada por una dieta basada en maíz, frijol y chile. A esta se le suma carne de animales silvestres y domésticos, peces, insectos y una gran variedad de vegetales y frutas.

Puchero mexicano, ensalada de nopal, chicharrón frito en manteca, revoltijo de camarones y tamales, son algunos de los platos que engalanan las mesas de los restaurantes. Chinicuiles (gusanos del maguey) fritos a la manteca, escamoles (larvas de hormigas) en caldillo enchilado con nopal o huevos y chapulines (langostas) en salsa de chocolate con almendras, jitomate y otras especias, son algunas de las rarezas culinarias dignas de ser degustadas. Las bebidas tradicionales como el mezcal y el pulque son aguardientes derivados de la planta del maguey, cerveza negra o rubia, aguas frescas de las más diversas frutas y no debe olvidar la sal y el limón para saborear una copa de tequila rubio. ¡Salud!.