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 domingo, 24 de octubre de 2004

Río Grande: Verano en el sur
Al norte de Tierra del Fuego junto al océano Atlántico la temporada de pesca de truchas arranca el viernes próximo y se extiende hasta el 17 de abril. Tarifas y servicios de un destino alternativo. Visita a la misión salesiana Nuestra Señora de la Candelaria

Lucas Vitantonio / La Capital

Situada sobre las frías aguas del océano Atlántico y en la zona norte de la isla de Tierra del Fuego, la ciudad de Río Grande ofrece una interesante combinación de naturaleza, historia y servicios que la convierten en el destino ideal para programar las próximas vacaciones.

Del otro lado del estrecho de Magallanes aguardan ríos repletos de truchas, una misión salesiana abierta a los viajeros y restaurantes que ofrecen cordero al asador como en ningún otro rincón de la Patagonia.

En Río Grande residen unos 60.000 habitantes y la "vedette" que atrae a criollos y extranjeros es la pesca de truchas. La apertura de la temporada pesquera está prevista para el próximo viernes. Ese día se realizará el acto oficial con la presencia de autoridades provinciales y municipales. Luego, en la intersección del río Grande y la ruta nacional Nº 3, se hará el primer lanzamiento simbólico de señuelos artificiales.


Piezas de gran porte
Tierra del Fuego es uno de los sitios de la Patagonia más codiciados por los pescadores. Los fanáticos arriban a la isla seducidos por las piezas de gran porte. La actividad se centra especialmente en el río Grande. Allí funcionan los cotos de truchas, donde para ingresar cada pescador debe pagar aproximadamente $170 por día. Ingleses y norteamericanos son asiduos concurrentes.

El río Grande posee una zona de acceso libre para los pescadores, preferida de los turistas nacionales. Hacia el sur de la isla existen también otros ríos y lagunas donde probar suerte desde la costa.

Las truchas se caracterizan por alimentarse en el mar y luego remontar el río contra la corriente para desovar cerca de las nacientes. Así lo hacen en el río Grande, que nace del lado chileno de la isla, en lago Blanco, y desagua en el Atlántico, cerca de la ciudad homónima.

La temporada de pesca se extenderá hasta el 17 de abril. Un dato importante es que entre el 1º de abril y el 17 de ese mes la devolución será obligatoria. Vale aclarar que en la temporada un pescador puede llevarse sólo una pieza y debe devolver las restantes al agua. En el resto del año rige la veda pesquera.

La geografía de Río Grande, situada a 230 kilómetros de Ushuaia, pertenece al ecosistema de la estepa agreste del litoral marino. La rica avifauna que habita la comarca motivó que en 1998 sea declarada área protegida y reserva costa atlántica de Tierra del Fuego.

La zona costera fueguina es ideal para el avistaje de aves, que en verano arriban procedentes de Canadá y Estados Unidos.


Museo de la Ciudad
Una de las principales atracciones culturales de Río Grande es el Museo de la Ciudad "Virginia Choquintel", posicionado entre los mejores de la Patagonia, que brinda información sobre las plantas petroleras radicadas en la zona y las culturas aborígenes que habitaron el norte de la isla.

Además exhibe ejemplares de cartografía, datos sobre los orígenes del pueblo que dio lugar a la ciudad y una colección de huesos de cetáceos y de aves. El acceso al museo es libre y gratuito.


Misión salesiana
Otro sitio imperdible es la misión salesiana Nuestra Señora de la Candelaria, donde actualmente funciona una escuela agrotécnica que capacita a los alumnos en el trabajo rural y en actividades agroturísticas. Allí los estudiantes de ambos sexos trabajan en el invernadero, la producción de forraje, la ganadería, los tambos ovino y bovino, la cría de porcinos y pollos parrilleros, y también en la elaboración de dulces, licores y quesos.

La misión salesiana está ubicada a sólo 10 kilómetros del centro de Río Grande, con entrada sin cargo. Ofrece una propuesta recreativa y cultural para pasar el día. Entre las opciones de entretenimiento figuran el museo (la entrada cuesta $2) que ofrece visitas guiadas a cargo de un integrante de la comunidad religiosa. Además funciona un restaurante donde la especialidad son las empanadas, guisos y carnes asadas. El menú promedio cuesta alrededor de $12 con bebidas.

La oferta recreativa de la misión se complementa con los paseos organizados por la escuela de equitación "La Cimarrona", que ofrece cabalgatas por cabo Domingo, laguna Don Bosco, el paraje El Remanso y llegan hasta el cementerio aborigen y sitios arqueológicos. El alquiler de caballos cuesta $12 por hora.

Dentro del predio salesiano también resulta interesante conocer la capilla histórica, el taller de las hermanas y la casa de la misión, que guarda testimonios del norte de la isla, a la que llegó en octubre de 1886 Julio Popper, el aventurero que descubrió el río Grande durante una expedición terrestre.

La misión está situada a la vera de la ruta nacional 3 y cerca del aeropuerto que comenzó a construirse en la década del 90. Desde 1893 la cruz de los salesianos enfrenta las aguas heladas del Atlántico sur y el edificio constituye el primer antecedente poblacional de la ciudad de Río Grande.

En la isla habitaron cuatro grupos aborígenes -Haush, Yámanas, Alacalufes y Selk'nam, éstos últimos más conocidos como onas- de hábitos nómades y que se dedicaban a la caza de guanacos, aves y otros mamíferos. A estas tribus que recolectaban vegetales en el bosque y la estepa y que apelaban poco a los recursos marítimos se dirigieron las acciones evangelizadoras de los misioneros.

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La ciudad fueguina florece en primavera.

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