"Ahora necesitamos de todos para recuperar la Vigil"

Los ex alumnos y directivos de la biblioteca proponen investigar los hechos ocurridos durante la intervención militar que arrasó con la institución

Los reclamos de la Comisión para la Recuperación de la Biblioteca Vigil son, básicamente, cuatro: la devolución de la personería jurídica, la investigación de los hechos ocurridos durante la intervención militar, la restitución de los bienes despojados y una indemnización o subsidio inicial.

"Lo más importante que a mí me pasa, con respecto a la devolución, es ver que estas construcciones populares son posibles -opina Celina Duri-. En todos estos años, más allá de que tuvimos democracia, se instaló la idea de que estas cosas no se pueden hacer, como que todo pasa por grandes empresas y grandes capitales y lo social y lo popular no es posible".

Las asambleas que convoca la Comisión son los lugares de encuentro. "El año pasado comenzamos a contactarnos con gente de la ex Comisión Directiva -cuenta Carlos Taruselli- y a reunirnos. El 11 de marzo hicimos una asamblea con 250 personas en Central Córdoba y desde el miércoles siguiente nos reunimos en la escuela".

Taruselli destaca que las asambleas son abiertas al público. "Viene gente del barrio, ex alumnos, ex directivos. Cualquiera puede venir, no hemos puesto condicionamiento alguno. Las opiniones se van enriqueciendo; una cosa es cuando uno piensa solo y otra cuando está pensando con otras cincuenta personas. Aparte la Vigil fue hecha por gente del barrio. Entonces ahora necesitamos de todos para la recuperación", explica.

Los miembros de la comisión se han dividido en grupos para ocuparse de actividades de prensa y organizar eventos y actos culturales. Para hoy está previsto un almuerzo a la canasta. "La idea, en cada actividad, es reunirnos y que cada uno traiga a otras dos o tres personas", dice Carlos. Cuando se entera que Marcelo Bustamante, el fotógrafo de La Capital, cursó la escuela secundaria en la Vigil, su reacción es inmediata: "no sabía que habías estudiado acá -dice-: ahora ya estás invitado a participar".


De ahora en adelante
Soñar no cuesta nada: ¿qué se podría hacer si se concreta la devolución de los bienes de la Biblioteca? "Todo lo que hacía Vigil -responde Celina Duri-, que era una relación profunda con las demandas del barrio. Hay que actualizar todo eso, ponernos en contacto con la gente y buscar esos mecanismos de comunicación entre la gente, que es lo que no sucede en estos edificios del gobierno, a pesar de que deberían ser de todos, ya que son provinciales".

Además, "hay un problema de cómo nos comunicamos y de cómo nos encontramos y cómo responder a las demandas que existan".

Sergio Gorosito insiste en el enlace entre las distintas generaciones vinculadas a la Vigil. "Nosotros, los ex alumnos, como tuvimos la suerte de recibir una educación de excelencia y gratuita -porque no pagábamos un peso-, queremos brindar nuestro esfuerzo para que nuestros hijos y nuestros nietos puedan decir en el futuro, como nosotros: estuvimos en un lugar que nos contuvo, que nos enseñó fundamentalmente a ser buena gente. Queremos ir brindando las pequeñas cosas", dice.

"Por supuesto que no vamos a arrancar de cero ahora y formar de repente el monstruo que fue la Vigil. Hay muchas cosas que hacer", agrega Sergio.

Entre los reclamos, la restitución de la personería jurídica aparece siempre en primer lugar. "Es fundamental para volver a tener los mismos derechos, para revisar todos los bienes y lo que se ha hecho en la liquidación. La Vigil funcionaba como institución y tenía una mutual. La excusa de los militares fue que la mutual no pagaba los bonos. Entonces se intervino y se liquidó todo, pese a que la Vigil tenía un capital muy superior a la deuda".

Por su parte, Celina Duri explica que la Vigil "tenía dos personerías jurídicas: una era la biblioteca, a nivel provincial, y otra la caja mutual, a nivel nacional. Se intervino a través de la Nación y se liquidó todo. Pero la biblioteca no tendría que haber desaparecido como institución, porque podría haberse mudado a cualquier local y seguir funcionando".

La investigación de los hechos de la intervención es también medular para la Comisión. A partir del primer "interventor normalizador" -el capitán de corbeta Esteban César Molina- se sucedieron varios liquidadores. En 1988 el actual liquidador, Emilio Echen vendió la colonia de Villa Gobernador Gálvez a la municipalidad de esa ciudad. Asesorada por un abogado -otro ex alumno-, la Comisión revisa actualmente el expediente judicial de la liquidación.


Un nuevo proyecto
La secretaria de Cultura de la Municipalidad, Marina Naranjo, forma parte de la Comisión para la Recuperación de la Biblioteca. "La Municipalidad apoya todo lo que realice esta asamblea en pro de la recuperación y también al servicio de ser un buen referente e interlocutor ante la provincia, que no ha contestado el documento que entregamos en respuesta al que nos dieron. Estamos esperando esa respuesta, éste es un proceso que empieza y no podemos decir cuándo se va a terminar", opina.

La tarea de la Municipalidad "es de acompañamiento, de compromiso en una lucha de una ciudad que apoya. A nivel oficial no hay instancias de consulta desde la provincia para ver cómo acercarse a través del municipio y hacer posible esta devolución", agrega la secretaria de Cultura, quien por otra parte recuerda que "no padecí lo que otros compañeros padecieron, soy de la segunda promoción, cuando terminó el año pleno de la experiencia Vigil (1976). Era una época muy buena, aunque económicamente dura".

"Lo que estamos haciendo ahora -estoy hablando como integrante de la asamblea y ex alumna- es empezar a recabar información para nosotros también plantear un nuevo proyecto", concluye Marina Naranjo.

Una referencia obvia es la propia experiencia. En ese sentido, Celina Duri dice que "se están haciendo reuniones con ex docentes y bibliotecarios: como no quedó nada escrito del proyecto educativo y por miedo la gente -los directivos, los docentes- quemó los papeles, los documentos, nos proponemos reconstruir ese proyecto a través de los testimonios".

"El anhelo de recuperar la Vigil es de siempre -dice Carlos Taruselli-. Yo estoy en la cooperadora de la primaria desde hace diez años, cuando mis hijos empezaron la escuela. Básicamente la idea era mantener la llamita de Vigil". Un pequeño fuego que se reaviva en la memoria.

La Escuela de Música. La Vigil multiplicó en forma incesante su oferta educativa y cultural.