| | jueves, 08 de julio de 2004 |
 | Dinamarca queda más cerca de lo que parece
En esta misma columna se había comentado, el pasado mes de abril, que los prestadores del Pami estaban "que trinan" y que uno, lector de Shakespeare él, había bautizado como "Dinamarca" al área jurídica del organismo. Todo indica que la alusión literaria incluía una clara referencia olfativa. Sin embargo, los frescos vientos provenientes del sur habrían logrado, por un momento, disipar los olores desagradables. Lamentablemente, comentan los expertos, todo indica que la renovación atmosférica resultó fugaz. Ellos les echan la culpa a los incendios en las islas y a los reiterados vientos del este, pero la cuestión -arguyen- es que se han resucitado viejas actuaciones de demoras en prestaciones (cuando éstas, juran, fueron hechas en tiempo y forma) e imputaciones de cuya veracidad no se puede estar seguro. Los afectados aseguran que ha retornado la "operación castigo" y que el objetivo del regreso no es precisamente favorecer a los jubilados, ya que la prestación no es judiciable. Asumiendo esta verdad, preguntan, ¿qué fines perseguirá el fogonero de esta operación? Por ahora no tienen respuestas, pero -precavidos ellos- mientras leen a William ya están desempolvando documentación a partir de la cual solicitarían que la Justicia investigue los propósitos, manejos y abusos que se cometen en "Dinamarca". Yes.
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Intendentes enojados con la gestión K
No es que desentonen con las líneas de acción que viene cumpliendo el presidente Néstor Kirchner, pero un grupo importante de intendentes de la región del Gran Rosario están más que enojados por el manejo que el gobierno nacional hace con la distribución de fondos en la provincia de Santa Fe. Y como ejemplo mencionan su paso por Rosario el último martes cuando a la hora del reparto el intendente Miguel Lifschitz se llevó 50 millones y ellos pretendían que fuera el gobernador el destinatario de esos fondos para una distribución más equitativa. Sin suerte en lo económico, los muchachos también se quejan porque el presidente hizo subir al escenario a Binner y mezcló transversalidad con peronismo. ¿Quién los entiende?
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Un cumpleaños no tan feliz
El festejo, esta vez, fue mucho más discreto que en anteriores ocasiones, cuando el publicista tiró literalmente la casa por la ventana. Pero los 51 años que cumplió ayer han moderado los ímpetus y también el bolsillo de Mario Borgonovo, quien optó por almorzar con sus amigos en una parrilla frecuentada por el ambiente artístico. En selecta compañía que incluyó al cantautor nativo Ricardo Centurión y al paladín del liberalismo Gerardo Bongiovanni, nuestro hombre intentó demostrar que el paso del tiempo no lo afecta. Y si bien la imagen juvenil que cultiva, lentes de contacto y coqueto peinado achatado de por medio, todavía se mantiene en relativo buen estado, comentan que sus íntimos ya le han sugerido un "look" más acorde con su medio siglo cronológico. Ayer, entre botellas de buen vino, la tenida se prolongó hasta las cuatro de la tarde, momento en que los mozos -que "balconeaban" el ágape desde lejos- sugirieron a los comensales emprender una cautelosa retirada. Ese fue el momento en que Bongiovanni demostró su vasta experiencia europea, que al parecer adquirió durante su último viaje. Indignado ante la expulsiva exhortación, y con españolísimo acento, el sesudo economista dijo que eso en la Madre Patria nunca hubiera sucedido. Y olé. |
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 | "Quiero que crean en la palabra de los que gobiernan, que se acabe el verso y la guitarra"
Néstor Kirchner
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